Memoria Histórica

Consumo
Los regalos y compras navideñas no siempre salen tan bien como esperamos. Los hay que no aciertan con la talla, en otras ocasiones el producto no es como aparecía en la web y otros simplemente prefieren cambiarlo por algo que se ajuste mejor a sus gustos. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha recordado a los consumidores sus derechos a la hora de llevar a cabo cambios y devoluciones tras la época navideña,coincidiendo con el inicio de las rebajas de enero.
¿Puede cambiar un producto si no le gusta?
Lo primero que debe tener en cuenta el consumidor es que la ley no obliga al vendedor a admitir un cambio o devolución en cualquier circunstancia. Cada establecimiento fija libremente, dentro del marco legal, las condiciones para llevar a cabo el cambio o la devolución de los productos. Eso sí, el comercio debe informar claramente a los clientes antes de la compra. La información sobre plazos y condiciones deberá figurar en el ticket de compra donde se indica el producto, el precio y la fecha de compra.
En algunos establecimientos se establecen unas condiciones especiales para las compras en periodo de rebajas (sobre la aceptación del pago con tarjeta, las devoluciones...). Pueden hacerlo, pero esas condiciones deben indicarse expresamente.
Qué debe saber antes de devolver o cambiar el producto
Si cumple los requisitos que fija el vendedor, este está obligado a aceptar el cambio o la devolución del producto. “De lo contrario, el consumidor debe exigir la hoja de reclamaciones y tramitarla a través de los servicios de consumo de su comunidad autónoma”, señala la OCU.
Cambio o devolución más allá del plazo fijado
En el caso de que el producto esté defectuoso o no cumpla con las características con que se anuncia, el vendedor deberá aceptar el cambio o devolución aunque ya se haya superado el límite de tiempo. Haciendo uso de la garantía, el consumidor puede exigir que le entreguen otro producto en perfecto estado o que le reparen el que tiene el problema. Si no hay acuerdo, podría pedir que le rebajen el precio si se lo queda así o, incluso, que le devuelvan el dinero alegando la resolución del contrato.
Consejos para evitar problemas
Memoria Histórica