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Sector aéreo

Aena-Enaire: 163 millones en alquileres desde 1990 y sin fecha para la construcción de sus sedes

Ambas compañías tienen previsto trasladar sus cuarteles generales al entorno del Aeropuerto de Barajas. En el caso del gestor de los aeropuertos, admite que no sabe cuándo podrá hacerlo por la pandemia

Sede central de Aena en edificio Piovera Azul
Sede central de Aena en edificio Piovera AzulMIGUEL RODRÍGUEZAENA

La pandemia no sólo ha provocado la peor crisis de la historia para las aerolíneas sino también para los aeropuertos. Y los españoles no son una excepción. Los aviones no vuelan y sin aviones, no hay ingresos. En el caso del gestor aeroportuario español, Aena, esa falta de ingresos ha puesto en jaque no sólo sus cuentas actuales sino también algunos de sus planes de desarrollo. Especialmente, el inmobiliario. Su congelación ha supuesto que la compañía tenga que meter en el congelador el proyecto para la construcción de una sede en propiedad en el entorno del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, lo que le obligará a seguir pagando alquileres para mantener sus sedes, como ha hecho hasta ahora. Algo que también le ocurrirá a Enaire.

Según una respuesta parlamentaria enviada a finales de diciembre a una batería de preguntas realizadas por el senador del Grupo Parlamentario Izquierda Confederal Carles Mulet, ambas compañías han abonado 163 millones de euros de forma conjunta desde 1990 en concepto de alquileres para ubicar sus diferentes dependencias. Es decir, una media de 8,15 millones de euros anuales. El año pasado, por ejemplo, Aena desembolsó 3,6 millones por el arrendamiento de una parte del edificio Piovera Azul.

Nueva sede

Para acabar con estos gastos, en los planes de ambas compañías, que durante muchos años fueron la misma hasta su escisión en 2014; está la construcción de dos sedes corporativas en el entorno del aeropuerto madrileño. Así quedaba recogido en el Plan Inmobiliario de esta instalación. Sin embargo, a día de hoy, no hay fecha para el comienzo del proyecto. El motivo: el coronavirus.

Según recoge el Gobierno en su respuesta al senador Mulet, en lo que concierne a la nueva sede de Aena, el coronavirus ha supuesto “un empeoramiento significativo de las principales magnitudes financieras de la compañía, tal y como lo demuestran los resultados económicos de la misma”. Por lo tanto, añade, “esta situación extraordinaria ha introducido incertidumbres en relación con la puesta en marcha de este proyecto que dependerá del momento en que haya una mayor visibilidad sobre el grado de recuperación de la actividad de Aena en los próximos años”.

Tiempo atrás, el Sindicato-ASAE también denunció que el edificio de Piovera Azul ha provocado problemas de lipoatrofia semicircular a algunos trabajadores tras su remodelación. La lipoatrofia semicircular es una lesión, atribuible a las condiciones de trabajo, que consiste en una atrofia localizada en el tejido adiposo subcutáneo que se caracteriza por la aparición de deformaciones en la superficie de la piel y que puede darse en diferentes zonas del cuerpo. Según los trabajadores, que así se lo expusieron en una carta al presidente de Aena, Maurici Lucena, los problemas se empezaron a originar con unos trabajos de reforma que se realizaron en el edificio. Según ha asegurado el Gobierno en su respuesta parlamentaria, “desde 2018, Aena viene implementando una serie de medidas -en las que habría invertido varios millones de euros, según asegura el sindicato ASAE- encaminadas a minimizar el riesgo de que las personas trabajadoras manifiesten sus síntomas en el edificio de La Piovera”. A comienzos del pasado año, la compañía admitió que se habían producido 32 casos de esta enfermedad. “Actualmente, todos los casos han remitido o se encuentran en proceso de remisión, corroborando la idoneidad de las medidas puestas en marcha en el edificio (ventilación, humedad, organización de cableados...).