A principios de verano, se presentó el Informe Global Entrepreneurship Monitor (GEM) España 2020-2021, que recogía la última información sobre el ecosistema emprendedor español. Como era de prever, la crisis de la COVID-19 ha supuesto en 2020 un parón en la actividad emprendedora, situando la Tasa de Actividad Emprendedora Total (TEA) en el 5,2% (6,1% en 2019), lejos de la media de la UE (8,1%), debido a la reducción experimentada en nuevas iniciativas. Se espera, además, que la actual situación de incertidumbre lastre también los resultados de 2021.

En este contexto, es imprescindible que desde las corporaciones se tomen en serio el potenciar e impulsar el intraemprendimiento. En Indra, cada año, la iniciativa Innovators reta a sus más de 50.000 profesionales a desarrollar ideas tecnológicas emprendedoras que den respuesta a desafíos actuales. Cerca de un tercio de su plantilla en unos 40 países diferentes se moviliza y participa en cada edición y ya son alrededor de 2.000 las ideas recibidas en sus cuatro años de vida. El resultado no solo es beneficioso para la compañía, sino que prepara al profesional para ser innovador, comprometido y proactivo, sea cual sea su futuro profesional.

Hace unos meses, Indra lanzó la quinta edición de Innovators a través de Indraventures, el vehículo corporativo de Indra para impulsar el modelo de innovación abierta de la compañía, bajo el lema «Ignite the future», ya que, según fuentes de la compañía, «pretende que los profesionales detonen su creatividad y definan el futuro con sus ideas, a través de la tecnología y la innovación». Como en años anteriores, se plantearon cinco desafíos y, por segundo año consecutivo, uno más, un reto social y un «hack-reto». Así, los profesionales tuvieron que optar entre: idear servicios ofrecidos por constelaciones satelitales; explotar los datos para transformar el tráfico aéreo; plantear casos de negocio para entornos phygital, en los que se combina el mundo físico y digital; fidelizar al cliente mediante ofertas digitales personalizadas o fomentar la inclusión laboral de personas con discapacidad. El sexto, el «hack-reto», consistía en desarrollar prototipos de código que dieran respuesta a esos mismos desafíos, pero utilizando Onesait Platform, la plataforma de código abierto (open source) de Minsait, una compañía de Indra.

Se han recibido 15 prototipos y cerca de 200 propuestas, entre las que ya se han dado a conocer las diez ideas finalistas, elegidas por Indraventures y el Comité de Innovación de Indra, formado por representantes de unidades corporativas, directivos de todas las unidades de negocio y expertos tecnólogos. Las propuestas candidatas son: aplicaciones para pacientes de enfermedades mentales o ictus, detección y reconocimiento de acumulación de basura en islas de reciclaje, sistema de sensores para monitorizar las cuencas hidrográficas de represas, diseño y replanteo de obras lineales con realidad aumentada y drones, sistemas de ciberseguridad antispoofing para sistemas de navegación global, inteligencia artificial para la reducción de la huella carbono de la aviación comercial, enjambres de UAVs para sintetizar la apertura de una antena, inteligencia artificial aplicada a las operaciones de control de tráfico aéreo, red de sensores para la vigilancia del espacio y una aplicación bancaria de compras inteligente.

En la gala de clausura, que tendrá lugar el 24 de noviembre, se presentarán todas estas ideas y se desvelarán las tres propuestas ganadoras, seleccionadas por el Comité de Innovación. Durante el acto, los asistentes (presenciales y online) podrán votar a la propuesta que ha realizado un Mejor Pitch, que se convertirá en la cuarta vencedora de la edición.

Las ideas ganadoras recibirán un premio de 5.000 euros y desarrollarán un business plan junto con el mercado al que pertenezca su iniciativa, pudiendo dedicar el 10% de su tiempo de trabajo durante tres meses a este objetivo. Posteriormente, cuando la idea alcance la madurez requerida, se procederá a su desarrollo.

Creando futuras generaciones

El intraemprendimiento, además de fomentar la innovación, mejora la participación de los empleados; aumenta su satisfacción laboral, puesto que tienen la oportunidad de desarrollar proyectos que se pueden hacer realidad; y atrae al talento. Pero también, algo extremadamente relevante en estos días, favorece cambios culturales y de mentalidad que aceleran la transformación corporativa y fomenta la creación de nuevos emprendedores. Esta es una de las razones por las que las organizaciones deben tomar parte y fomentar iniciativas para que sus profesionales abracen la cultura de la innovación y sean emprendedores, por el bien futuro de la sociedad.

De hecho, si hay un mensaje que repiten los ganadores de ediciones anteriores es, sin duda, el agradecimiento por ayudarles a materializar una idea, la posibilidad de que una ilusión se convierta en una realidad. Y, efectivamente, algunas de las propuestas ganadoras de Innovators forman parte a día de hoy del portfolio y de la cadena de valor de la compañía.

La llamada al emprendimiento no se queda solo en los profesionales de Indra. Hace pocos meses, la compañía anunciaba la creación de Ventures4Inclusion junto a la Fundación FDI y Hands On Spain, la primera lanzadera de emprendimiento donde se reta a personas con discapacidad a presentar proyectos basados en tecnología que favorezcan su empleabilidad.