Opinión

España es una península, no una isla

Aunque es el país que más ha crecido de la eurozona, tendrá problemas con la inflación y el crecimiento.

Pedro Sánchez, en un acto de partido en Andalucía
Pedro Sánchez, en un acto de partido en AndalucíaÁlex CámaraEuropa Press

El Gobierno había fiado la recuperación económica a una inyección de gasto público sin parangón bajo el paraguas del BCE, que activó el botón rojo para regar con manguerazos de dinero la zona euro. Pero cuando hay una situación de crisis, a la economía le ocurre como a la medicina: un diagnóstico correcto es la condición necesaria, pero no suficiente, para poder curar al enfermo.

La autoridad monetaria se equivocó en el diagnóstico. Interpretó que la caída de precios, que se produjo durante los peores momentos de la pandemia, indicaba que la demanda necesitaba un estímulo porque estaba por debajo de su nivel potencial, y se puso a ello. Sin embargo, el consumo solo necesitaba volver a la normalidad. La consecuencia de la decisión del BCE fue una subida de precios, dando discurso a los monetaristas de la escuela de Milton Friedman.

La guerra ha agravado la situación creando tensiones energéticas y aumentando los problemas existentes en la cadena de suministros. Los dos fenómenos juntos hacen que la zona euro se encuentre en una situación de mayor debilidad que otras economías. No obstante, EE UU ha arrojado un crecimiento negativo del PIB en el primer trimestre del año que, además, ha visto como la Reserva Federal realizaba una subida histórica de los tipos de interés.

Las alarmas ya han saltado y se van sumando los economistas que anticipan un periodo de estanflación, algunos de notable peso como Ben Bernanke. España es una península, no una isla, y aunque es el país que más ha crecido de la eurozona, tendrá problemas con la inflación y el crecimiento. Además, de aquí a un año habrá elecciones municipales, autonómicas y después vendrán las generales si no hay anticipo.

Es difícil pensar que el Gobierno tomará medidas impopulares si no son tajantemente impuestas por Bruselas. Mis alumnos en la universidad solo son conscientes de haber vivido épocas de crisis económica y algunos periodos de recuperación, pero no conocen un momento en que el ciclo haya estado en expansión. Algo se habrá hecho mal durante todos estos años.