Operación salida de agosto: el depósito sale entre 15 y 23 euros más caro que el del año pasado

La operación salida de agosto ha salido a los españoles entre 15 y 23 euros más cara que la del año pasado pese a los esfuerzos del Gobierno por rebajar los precios de los carburantes con su bonificación de 20 céntimos el litro. Según los datos difundidos este jueves por el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 26 de julio y a 1 de agosto, pese a que la gasolina y el diésel se consolidan por debajo de los dos euros con su sexta y quinta semana a la baja, respectivamente, los precios distan mucho de los del pasado verano. Sin tener en cuenta el descuento de 20 céntimos, la gasolina es un 34% más cara y el diésel un 49% más caro con respecto a hace un año.

Del 27 de julio al 2 de agosto de 2021, el litro de gasolina costaba 1,416 euros y el de diésel 1,269 euros. Mientras, en la última semana de julio y primer día de agosto de 2022, coincidiendo con la operación salida, el precio medio del litro de gasolina se situó en 1,902 euros, tras registrar una bajada del 2,66% con respecto a la anterior semana, su sexto descenso consecutivo. En el caso del diésel, el precio medio del litro fue de 1,893 euros, tras registrar una bajada del 2,06%, encadenando su quinta caída.

En lo que se refiere a la gasolina, se trata de su nivel más bajo desde el pasado 16 de mayo, mientras que el gasóleo ha descendido a mínimos desde el 30 de mayo. Con respecto a los niveles de finales de junio, cuando los carburantes vieron fin a la espiral alcista que venían registrando en lo que iba de año, la gasolina se ha abaratado un 11,2%, mientras que el gasóleo es casi un 10% más barato.

Ese importe medio incluye los impuestos, pero no refleja el descuento que entró en vigor desde el pasado 1 de abril de al menos 20 céntimos por litro, ya que hay descuentos superiores, dependiendo de la petrolera y de las promociones a los clientes fidelizados. Teniendo en cuenta esa subvención, el precio del litro de gasolina sería de 1,702 euros, mientras que el del gasóleo se situaría en los 1,693 euros, en ambos casos inferior a los que marcaba a finales de marzo, antes de la entrada en vigor de la ayuda, pero muy lejos de los valores de hace un año.

El galopante encarecimiento de ambos carburantes ha provocado que el precio de la gasolina haya aumentado cerca un 34% con respecto a la misma semana de hace un año, mientras que en el caso del gasóleo se ha encarecido un 49%, aunque sin tener en cuenta la bonificación vigente actualmente. Con los precios actuales y aplicando el descuento, llenar un depósito medio de 55 litros tanto con gasolina como con gasóleo cuesta algo más de 93 euros. Hace un año, en cambio, llenar un depósito de gasolina costaba cerca de 78 euros y uno de diésel 70 euros. Es decir, ahora cuesta entre 15 y 23 euros más caro.

Estas cifras se registran en un entorno de precios elevados del crudo en el actual contexto, marcado por la guerra en Ucrania. No obstante, este jueves el barril de Brent, de referencia en Europa, cotizaba por debajo de los 100 dólares (97 dólares), mientras que el Texas americano se intercambiaba a 91 dólares.

Una vez más, el precio de ambos carburantes en España -sin aplicar el descuento de 20 céntimos- se mantiene por encima de la media europea, que, según la estadística de la UE, se sitúa en 1,856 euros el litro para la gasolina, y 1,878 euros para el gasóleo. No obstante, si se comparan los precios sin bonificación de España con los de la zona euro, el coste del diésel en nuestro país es más barato que la media de la eurozona (1,908 euros), aunque la gasolina sigue siendo más económica que en España (1,899 euros el litro).