2,67 euros, el exiguo ahorro mensual de los españoles por la rebaja del IVA

La prórroga del decreto de medidas urgentes aprobado por el Consejo de Ministros el pasado 27 de junio dio continuidad al paquete que intentó paliar las consecuencias económicas de la guerra de Ucrania sobre las familias. Una intención loable sobre el papel, pero que no se ha correspondido con un apoyo real a los bolsillos de los hogares, al menos en alguna de estas disposiciones.

Tal es el caso de la rebaja del IVA de los alimentos básicos, planteada como un amortiguador para los efectos que la inflación ha supuesto en el presupuesto de las familias. Según el último informe mensual de recaudación publicado por la Agencia Tributaria, el coste acumulado para la recaudación de las arcas públicas durante el primer semestre del año de esta rebaja impositiva ascendió a 626 millones de euros, lo que supone una media de 104 millones al mes. Con una simple regla matemática, eso significa que los 48 millones de habitantes censados en España apenas han obtenido una rebaja media de 2,16 euros por persona desde que el Gobierno de Pedro Sánchez decidió ampliar el alcance de este paquete impositivo.

Tipos más bajos

Hay que recordar que desde el 1 de enero [[LINK:INTERNO|||Article|||63abd7636be1b0e4106113d5|||el tipo de IVA de los alimentos básicos –que agrupa productos como frutas, verduras, leche o pan– pasó del superreducido del 4%, al cero; mientras que el de los aceites y pastas es del 5%, en lugar del 10%]]. La persistencia de la inflación de los alimentos, que en julio continuaba en el 10,3% interanual, decidió al Ejecutivo a prolongar también otras medidas, como recortar la rebaja del IVA del gas –que tributa a un tipo del 5%, en lugar del 21% habitual–, lo que ha supuesto una merma de recaudación de 136 millones de euros en la primera mitad de 2023. Si se suma esta cantidad al IVA alimentario, la rebaja media apenas crece en 48 céntimos, hasta 2,67 euros.

La Agencia Tributaria no contabiliza el impacto recaudatorio de ha tenido la [[LINK:INTERNO|||Article|||633c2d9450eab0e4fbeb5a47|||bonificación de los impuestos eléctricos –IVA, impuesto de generación e impuesto especial de electricidad–,]] todos prorrogados hasta final de año, porque llevan en vigor más de un año y, por lo tanto, no afectan a la comparación interanual.

Ayudas mal enfocadas

Organismos oficiales como el Banco de Españao la Airef, y privados como Fedea o Funcas, han reiterado en varias ocasiones a través de sus informes que se deben retirar esa ayudas de forma generalizada y focalizarlas en los hogares más vulnerables. Según las cuentas de Fedea, Hacienda podría ahorrarse hasta 13.000 millones de euros en un año concentrando estas ayudas en las familias y empresas que verdaderamente lo necesiten, ya que calculan que los hogares con más renta ahorran el triple que los que tienen ingresos más bajos gracias a la rebaja fiscal a la comida al tener un mayor gasto. El propio Banco de España cifró el impacto presupuestario de todas las medidas anticrisis aprobadas desde que se declaró la guerra en Ucrania en cerca de 37.000 millones hasta 2025. Desde el Ministerio de Asuntos Económicos, su titular, Nadia Calviño, se ha limitado a decir que las medidas adoptadas son cada vez «más quirúrgicas» y que se irán retirando una vez demuestren que ya no son necesarias.

Rendimientos de trabajo

El informe de la Agencia Tributaria también revela el impacto recaudatorio del incremento de la reducción de los rendimientos del trabajo de hasta 21.000 euros en el IRPF, recogida en los Presupuestos de 2023, que han producido un ahorro el contribuyente de 306 millones. Otras medidas han tenido un impacto menor. Así, la ampliación de la deducción por maternidad –de 34 millones–, la reducción adicional sobre el rendimiento de los autónomos que cotizan por estimación objetiva –con un coste de 36 millones–, el aumento de los gastos de difícil justificación (17 millones) o la rebaja del IVA para los productos de higiene íntima femenina (8 millones). Todo ello ha restado al Fisco 95 millones. En compensación, el aumento de la presión fiscal ha contribuido a compensar en parte ese gasto. Por ejemplo, la puesta en marcha delnuevo impuesto especial sobre los envases de plástico no reutilizables ha permitido ingresar 279 millones de euros adicionales y el cambio en la compensación de pérdidas del impuesto de sociedades, 232 millones más.

Hacienda ha ido batiendo récord tras récord de recaudación durante los últimos cuatro años, y ha mantenido su fortaleza en el primer semestre, alcanzando los 107.009 millones de euros de ingresos, un 3,8% más que en la primera mitad de 2022.

Dudas futuras

Sin embargo, algunas sombras se divisan en el horizonte tributario cuando se analizan los datos de forma aislada de cada mes y sectorialmente. De este modo, tanto en mayo como en junio los ingresos fiscales muestran un descenso en comparación con el mismo mes del año 2022, del 5,9% y del 0,7%, respectivamente, que la Agencia Tributaria vincula directamente con el aumento de las devoluciones, en un momento en que la economía ha empezado a ralentizarse y, con ello, seguramente la recaudación también.

Con datos de la campaña de la renta de principios de julio –los últimos disponibles recogidos por Efe–, el departamento de María Jesús Montero defiende que las devoluciones tributarias solicitadas han experimentado un fuerte aumento de su importe, del 16,5%, muy superior al repunte de las cantidades a ingresar, que lo hizo en un 8,32%. Así se confirma la previsión realizada en los Presupuestos Generales de 2023, en los que el Gobierno ya preveía una desaceleración de la recaudación, tras consignar una previsión de ingresos de 262.781 millones, un 7,7% más que en 2022, un ejercicio en el que la recaudación se había disparado un 14,4%.