Vivienda

El ahorro necesario para dar la entrada de una casa se dispara un 34% en cinco años, hasta 65.000 euros, y hunde la intención de compra

En 2019, el desembolso inicial era de 48.663 euros, con el precio medio de la vivienda en 162.210 euros. En 2024, el precio medio de la vivienda ha subido hasta los 217.075 euros y el porcentaje de inquilinos que se plantea comprar ha caído al 48%

Una persona sujeta las llaves de una vivienda
Una persona sujeta las llaves de una viviendaLa RazónLa Razón

El sueño de la vivienda propia se aleja cada vez más para muchos españoles. El ahorro necesario para dar la entrada se ha disparado un 33,82% en sólo cinco años, alcanzando los 65.122 euros de media, según datos de Fotocasa. Ante unos precios de la vivienda cada vez más prohibitivos, la intención de compra a corto plazo (cinco años) se ha reducido al 48% en 2024, frente al 52% que registró en 2023, recoge el portal Pisos.com. Para miles de jóvenes, la opción de ser propietarios se diluye, empujándolos hacia un alquiler que parece, por ahora, la única alternativa viable económicamente, aunque también lo es cada vez menos por el encarecimiento de las rentas.

En concreto, en septiembre de 2019 una vivienda tipo de 90 metros cuadrados costaba de media 162.210 euros, lo que suponía una entrada estándar del 20% de 32.442 euros. Teniendo en cuenta el 10% adicional de gastos, la cifra se incrementaba hasta los 48.663 euros. Sin embargo, en 2024 el precio medio de la vivienda ha subido hasta los 217.075 euros, lo cual implica una entrada del 20%, de 43.415 euros y de 65.122 euros si se contemplan el 10% de gastos adicionales, según los datos de Pisos.com. En comparación a 2023, el incremento es del 15,47%.

"Comprar una vivienda en España es complicado, en especial para las generaciones más jóvenes, que tienen unas condiciones laborales no tan favorables y se ven obligados a recurrir a un mercado del alquiler que acaba, en la mayoría de los casos, con su capacidad de ahorro", ha recalcado el director de Estudios de Pisos.com, Ferran Font. Además, destaca que "pese a que existen excepciones de entidades bancarias que conceden hasta un 95% de la financiación -incluso un 100% en algunos casos- no suele ser lo habitual".

En consecuencia, el porcentaje de inquilinos que se plantea comprar una vivienda ha caído cuatro puntos en el último año, hasta el 48%. Fotocasa señala que la cifra de 2024 también está un punto por debajo del registro de 2022, aunque se mantiene por encima del 44% de 2021 y el 41% de 2020. Este descenso tiene su raíz en el grupo de los que pretenden cumplir este objetivo en el plazo de dos años, que se reducen del 20% al 16%, mientras que los que lo pretenden en un periodo comprendido entre los dos y los cinco años se mantienen en el 32%. También se incrementa el grupo de los que descartan la compra tanto a medio como a largo plazo, ascendiendo al 19%, frente al 17% de 2023.

La caída en el apetito por la compra de vivienda impulsa un aumento en el porcentaje de quienes buscan alquilar. aunque sin descartar la posibilidad de adquirir en el futuro. Actualmente, un 33% de los demandantes de vivienda opta por el alquiler sin planes inmediatos de compra, frente al 31% registrado en 2023. Así, el dato actual se aproxima al 34% alcanzado en 2022, reflejando una tendencia de prudencia en el mercado inmobiliario.

De hecho, el 43% de los inquilinos vive de alquiler por la imposibilidad de comprar una vivienda, un dato que se ha incrementado cinco puntos en tan solo un año, comenta María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa. Un 92% de los demandantes de alquiler creen que los precios de la vivienda en propiedad son caros o muy caros. Un porcentaje que ha permanecido bastante estable a lo largo del tiempo (en 2023 era el 93%) pero en el que ha ganado peso la percepción ‘muy caro’, que representaba el 62% hace dos años, en 2023 subió hasta el 69% y en la actualidad se ha situado en el 74%. Es decir, un incremento de doce puntos en veinticuatro meses.

La comunidades más caras para comprar vivienda y con mayor esfuerzo inicial

La compra de un piso en España continúa reflejando notables disparidades regionales y un marcado incremento en los precios. Según el informe de Pisos.com, entre las comunidades autónomas con los inmuebles más caros, las Islas Baleares lideran el ranking con un precio medio de 426.092 euros, seguidas por Madrid (394.183 euros), el País Vasco (284.255 euros) y Cataluña (267.207 euros). En cada una de estas la entrada y los gastos adicionales que correrán a cargo del comprador alcanzan los 127.827 euros, 118.255 euros, 85.276 euros y 80.162 euros, respectivamente.

Por otro lado, las comunidades que han experimentado los mayores aumentos de precio en los últimos cinco años también se concentran en las regiones de alta demanda. Madrid encabeza este crecimiento con un aumento del 54,8% en los precios, seguida de cerca por las Islas Baleares (49,87%), la Comunidad Valenciana (48,77%) y Canarias (44,79%).

Extremadura y Castilla-La Mancha, las regiones más asequibles

En el otro extremo, comunidades como Extremadura (80.190 euros), Castilla-La Mancha (87.777 euros), Castilla y León (120.232 euros) y Murcia (128.439 euros) presentan los precios de vivienda más accesibles en el país. Estos precios más bajos permiten a los compradores afrontar un desembolso inicial significativamente menor: en Extremadura, por ejemplo, una entrada cuesta 24.057 euros, mientras que en Castilla-La Mancha, Castilla y León y Murcia los valores alcanzan los 26.333 euros, 36.069 euros y 38.532 euros, respectivamente.

En palabras de Font, "el caso extremeño muestra como todavía existen regiones de nuestro país en las que una entrada sigue por debajo de los 25.000 euros, pues pese a haber experimentado un incremento de precio a lo largo de los últimos cinco años, solo ha sido del 13,04%".

En siete capitales de provincia el precio se ha duplicado

Si el análisis se centra en las capitales de provincia, se observan tendencias aún más pronunciadas. En Barcelona, el precio medio de venta se sitúa en los 469.523 euros, lo que implica un pago inicial de 140.857 euros, sin incluir los impuestos por transmisión patrimonial (ITP). Madrid, por su parte, muestra precios de venta aún más elevados, con una media de 551.104 euros y un desembolso inicial de 165.331 euros. San Sebastián, en el País Vasco, también destaca por sus altos precios, con una media de 597.178 euros y una entrada inicial de 179.153 euros.

Además, los precios de las viviendas en siete capitales de provincia se han encarecido más de un 50% en los últimos cinco años, un fenómeno que evidencia una mayor presión de demanda en las principales áreas urbanas y turísticas del país. Alicante lidera este incremento con un 66,1%, seguido de Málaga (64,99%), Palma de Mallorca (63,16%), Santa Cruz de Tenerife (61,13%), Madrid (59,52%) y Valencia (57,92%). En el lado opuesto, ciudades como Palencia (-0,44%) y Zamora (-4,22%) han registrado leves caídas en los precios, convirtiéndose en las únicas capitales de provincia con descensos en el costo de la vivienda.