Vivienda

Atrapados en el nido: casi la mitad de los jóvenes de hasta 31 años vive aún con sus padres

La mitad de los jóvenes vive fuera del hogar familiar, pero muchos de ellos todavía siguen necesitando apoyo económico

Un joven en el balcón de su vivienda
Un joven en el balcón de su viviendaDavid Zorrakino / Europa PressDavid Zorrakino / Europa Press

Independizarse, lejos de ser una opción viable para muchos jóvenes en nuestro país, se ha convertido en un sueño utópico al alcance de muy pocos. Los altos precios de la vivienda, la escasa oferta, los salarios bajos y los contratos precarios dificultan afrontar el coste de vivir fuera del hogar familiar, por lo que emanciparse se mantiene lejano para gran parte de la juventud. Tanto es así que el 45% de los jóvenes de hasta 31 años sigue viviendo con sus padres en España, tal y como muestra el IV Observatorio Cofidis de Economía Sostenible en el Hogar 2025.

La mitad de los jóvenes, por tanto, ha logrado emanciparse, aunque esto no implica necesariamente estabilidad económica. Y es que más del 38% sigue necesitando apoyo económico externo, bien de sus progenitores (26,3%), de otros familiares (7,6%) o de personas cercanas no familiares (4,4%). Esto "evidencia la fragilidad de sus condiciones de vida incluso fuera del hogar familiar", señalan.

A nivel de ingresos, estas personas se encuentran con limitaciones para hacer frente a cualquier reto financiero, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Quienes tienen menos de 24 años perciben una renta media anual de 15.364 euros, mientras que en el tramo de 25 a 29 años, el salario promedio asciende a 21.039 euros. Para el grupo de 30 a 34 años, el ingreso medio es de 25.222 euros.

Al percibir unos salarios bajos, ahorrar también se vuelve todo un reto para este colectivo, por lo que casi dos de cada diez jóvenes no consiguen ahorrar nada a final de mes. Entre quienes sí logran hacerlo, un 32,9% ahorra menos del 10% de sus ingresos, un 38% entre el 10% y el 30%, y apenas un 19,3% supera el 30%.

La limitada capacidad de ahorro se traduce en una baja resiliencia financiera. El 42,3% de los jóvenes emancipados no podría hacer frente a un gasto imprevisto de 10.000 euros, y además, un 31,3% adicional no lograría afrontar siquiera un gasto de 5.000 euros. Por tanto, el informe financiero señala que casi tres de cada cuatro jóvenes independizados "están expuestos a un elevado nivel de vulnerabilidad económica en caso de imprevistos de cierta magnitud".

Entre los jóvenes que todavía viven con sus padres, el 24,1% no puede ahorrar nada, y el 35,5% no podría cubrir un gasto de 10.000 euros. A pesar de que estos tienen menos cargas económicas directas, su capacidad de ahorro no mejora respecto a quienes ya se han emancipado. Esto puede deberse a que las personas que han logrado independizarse suelen partir de una mayor estabilidad laboral o de ingresos a pesar de enfrentarse a un mayor nivel de gastos cotidianos e imprevistos.

"En ambos perfiles, los datos reflejan una realidad común: la precariedad económica continúa condicionando las decisiones de vida de la juventud española y limita sus posibilidades de planificación a medio y largo plazo", sentencian.