Motor

Un auténtico ejercicio de paciencia

Las empresas automovilísticas ya no fabrican vehículos para almacenarlos y luego venderlos, sino que solo lanzan el proceso de producción de los automóviles que ya han vendido

Cadena de montaje de coches Seat en la Fábrica de Martorell
Cadena de montaje de coches Seat en la Fábrica de Martorellseatseat

Hace unas semanas, concretamente a mediados de junio pasado y ante el final del contrato de renting de mi vehículo actual diésel, de tres años, opté por un vehículo híbrido no enchufable de una conocida y popular marca. Cuál no sería mi sorpresa cuando, tras firmar el contrato, la citada marca me comunica que me entregará el vehículo el próximo 17 de mayo de 2024. Es decir, he de esperar casi un año para disfrutar de un vehículo que me resulta imprescindible tanto para mis desplazamientos personales como profesionales. Comento esta circunstancia con amigos y conocidos y muchos de ellos se quejan de los dilatados plazos de entrega que ciertas marcas de automóviles ofrecen a sus clientes.

Estos plazos me recuerdan a los que mi querido padre vivió en los primeros años 60 del pasado siglo cuando se compró su primer automóvil, un Seat 600 blanco, por supuesto. Recuerdo que cuando lo adquirió le pusieron en una lista de espera que duró meses. No recuerdo exactamente si tuvo que esperar tanto tiempo como yo, casi 60 años después. Comprendo que, con las tensiones que ha sufrido la cadena de suministro en los últimos años, las empresas automovilísticas hayan cambiado sus estrategias de producción moviéndose, en muchos casos, de la tradicional «make-to-stock» a la actual «make-to-order». Es decir, ya no fabrican vehículos para almacenarlos y luego venderlos, sino que solo lanzan el proceso de producción de los automóviles que ya han vendido. Así consiguen optimizar los suministros más estratégicos, como los componentes electrónicos, aplicándolos solo a la fabricación de los ya vendidos. Simultáneamente, mejoran el flujo de caja reduciendo el stock de vehículos terminados para su venta.

Querido lector, sea más previsor e inicie la búsqueda de su vehículo nuevo meses, mejor, años antes de que lo vaya a necesitar. ¿Se imaginan cualquier otro sector, salvando la compra de vivienda sobre plano, en el que el comprador deba esperar 11 meses para recibir el bien que ha comprado? Yo tampoco. Pues eso, a esperar toca.

Juan José Montiel, profesor de EAE Business School