Protestas

Bruselas cede a la presión y retira el plan de reducir un 50% los pesticidas, pero los agricultores no ceden

Los agricultores consideran esta medida insuficiente y piden revisar los acuerdos con terceros países y prohibir los productos que no cumplan la misma normativa que los europeos

Bruselas comienza a hacer concesiones tras las protestas de los agricultores que se han extendido a prácticamente todos los países europeos, incluida España. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha anunciado este martes desde el hemiciclo de Estrasburgo (Francia) que retirará la propuesta para reducir a la mitad el uso de pesticidas en la UE porque cree que se ha convertido en un “símbolo de polarización”. Esta propuesta inicial del Ejecutivo comunitario pretendía reducir de aquí a 2030 el uso de la mitad de los pesticidas químicos y, en consecuencia, que estos fueran sustituidos por otras alternativas, así como la prohibición de los más peligrosos.

Con este paso, von der Leyen intenta aplacar la ira del mundo rural en la vuelta atrás de las elecciones europeas, ante el peligro de que partidos euroescépticos sepan canalizar el descontento rural. Eso no quiere decir que la Comisión Europea haya renunciado a imponer medidas para luchar contra el cambio climático sino que reconoce necesitar más tiempo para que éstas sean consensuadas con los agricultores. Von der leyen ha prometido un nuevo plan "más maduro" con la participación del sector. A finales del mes de enero, antes de que arreciarán las protestas, el Ejecutivo comunitario inició un Diálogo Estratégico que se extenderá hasta el verano y se espera que sus conclusiones sirvan de cara a la próxima legislatura europea que arrancará tras los comicios de junio.

Lo cierto es que sacar adelante esta paquete ya se antojaba complicado debido a la oposición de algunas capitales y el rechazo del hemiciclo europeo. Todo indica que Von der Leyen ha querido cubrirse las espaldas antes de que esta iniciativa fracasara y esto debilitara su posición ante un hipotético segundo mandato al frente del Ejecutivo comunitario.

"Queremos asegurarnos de que los agricultores sigan siendo los protagonistas de este proceso", ha apuntado la política alemana en su intervención dedicada a repasar los logros de la última cumbre celebrada la semana pasada y que coincidió con una manifestación multitudinaria de agricultores de toda Europa en la capital comunitaria. Tras este encuentro, von der Leyen anunció una propuesta en las próximas semanas para aligerar la burocracia que soportan los agricultores. Además, la semana pasada Bruselas también eximió de la obligatoriedad del barbecho en 2024 e introdujo la protección de ciertos productos sensibles ante las importaciones provenientes de Ucrania.

No parece que esto vaya a ser suficiente para contentar a los agricultores. Siguen pidiendo que la Unión Europea exija a los países fuera del bloque comunitario las mismas exigencias que a los agricultores europeos y que esto aparezca negro sobre blanco en los acuerdos comerciales firmados.

También persiste la desconfianza sobre una posible propuesta futura sobre pesticidas.” El Parlamento Europeo rechazó el reglamento y, por lo tanto, la Comisión Europea no ha tenido mucha más alternativa que retirarlo. Lo dábamos por hecho. Ha sido un despropósito, un reglamento absurdo sin consensuarlo con el sector agrario. De hecho, la tramitación no la hizo la comisión de agricultura sino la de medioambiente. El reglamento sólo planteaba medidas restrictivas sin criterios científicos y sin aportar soluciones para nuevas plagas o nuevas enfermedades que pudieran venir. Me temo que cuando se forme la nueva Comisión Europea el reglamento saldrá adelante con otro nombre. Se llamaba el reglamento de uso sostenible de fitosanitarios, pero no era un uso sostenible, era directamente la eliminación”, explica a la Razón, Andrés Góngora, responsable de frutas y hortalizas de la Coordinación de Organizaciones Agricultores y Ganaderos.