Industria

Bruselas se prepara para rescatar al sector del acero ante los aranceles de Trump

Bruselas sopesa incluirlo entre los sectores autorizados a recibir ayudas de Estado

Canadá es su principal proveedor de acero, seguido por Brasil y México, con productos destinados a otras industrias como la automotriz o la construcción.
Planta de producción de aceroEuropa Press

La Comisión Europea ha puesto en marcha este viernes una consulta sobre la revisión de sus normas sobre rescates públicos a empresas en la que contempla incluir el acero entre los sectores para los que Bruselas puede autorizar este tipo de ayudas, de las que hasta ahora estaba excluido.

Las llamadas Directrices sobre Rescate y Reestructuración fijan las condiciones bajo las cuales las empresas no financieras que atraviesen dificultades pueden recibir ayudas de Estado sin minar la competencia y datan de 2014, por lo que el Ejecutivo comunitario quiere revisarlas para asegurar que más de una década después siguen cumpliendo sus objetivos.

La revisión, sobre la que Bruselas recabará opiniones hasta el próximo 14 de noviembre, sopesa la posibilidad de ampliar el alcance de las directrices para incluir al sector del acero, que actualmente está excluido de las mismas, según explicó la Comisión Europea en un comunicado, según informa Efe.

Ayudas de Estado

Los tratados de la UE permiten conceder ayudas de Estado para facilitar el desarrollo de algunas actividades económicas si esto no afecta negativamente a las condiciones comerciales hasta el punto de ir en contra del interés común y las directrices establecen los requisitos que deben cumplirse para que los Gobiernos puedan dar este tipo de apoyo a empresas no financieras.

Actualmente, todos los sectores con excepción del acero, el carbón y el sector financiero pueden beneficiarse de ayudas públicas bajo estas directrices cuando cumplen los criterios para considerarlas "empresas en dificultades".

La revisión propuesta por Bruselas plantea, además de incluir el acero entre los sectores que podrían optar a ayudas, enmendar la definición de "empresa en dificultades" para ciertos tipos de empresas emergentes ("start-ups") innovadoras que ya son elegibles para recibir ayudas bajo otros instrumentos.

Asimismo prevé clarificar ciertas partes de esta definición, en particular el concepto de "fondos propios" y su relación con el capital y la solvencia de las empresas, así como hacer algunos cambios técnicos tras varias sentencias de la justicia europea.

"Nuestra revisión de las Directrices de Rescate y Reestructuración busca alinearlas con la realidad económica de hoy, al tiempo que reconoce el gran impacto que las ayudas de rescate y a la reestructuración tienen sobre la Competencia", dijo en un comunicado la vicepresidenta comunitaria responsable de Competencia, Teresa Ribera.

Las reglas, recordó el Ejecutivo comunitario, buscan asegurar que estas ayudas públicas, que son de las que más distorsionan la competencia, se canalizan allí donde más se necesitan y que los inversores de las empresas en quiebra asumen su parte de los costes de reestructuración, en lugar de dejar que la carga recaiga sobre los contribuyentes.

EEUU.- EEUU espera recaudar 50.000 millones de dólares al mes con los aranceles
EEUU.- EEUU espera recaudar 50.000 millones de dólares al mes con los arancelesEuropa Press

La potencial inclusión del acero entre las industrias que podrían recibir rescates o ayudas públicas a la reestructuración se plantea en un contexto de crecientes dificultades para el sector en la UE, en particular por los aranceles impuestos por Estados Unidos, que actualmente son del 50%, los más altos entre los aplicados a los bienes europeos.

Estos vinieron a sumarse al exceso de capacidad de producción de la industria a nivel global, sobre todo en Asia debido a los subsidios masivos a las firmas chinas, que ha generado un descenso de la manufactura europea en los últimos años.

De hecho, Bruselas presentó en marzo un Plan de Acción para el Acero y los Metales que prevé medidas de apoyo al sector, en particular a su descarbonización, pero también de protección comercial.