Finanzas

¿Cómo pago este verano en el extranjero?

A todos nos surgen las mismas dudas cuando salimos fuera de España por vacaciones: ¿Sale más rentable cambiar el dinero aquí o en el destino?, ¿cobrarán una comisión muy alta en los cajeros?, ¿podré pagar con tarjeta de crédito?... He aquí algunas recomendaciones

La comisión por comprar con tarjeta es más baja que la que se aplica por sacar dinero
La comisión por comprar con tarjeta es más baja que la que se aplica por sacar dinerolarazon

Nuestras vacaciones de verano son el momento más esperado del año. Queremos que todo salga bien y llevamos planeando la ruta, los monumentos y las playas que visitar e incluso los restaurantes donde comer desde hace meses. Pero no hay que olvidar los métodos de pago. Informarnos de cuál es el mejor dependiendo del país al que viajemos nos permitirá ahorrar un buen pico y evitar algunos disgustos.

Para ello conviene informarse previamente de la moneda que se maneja en el país al que vamos (hay hasta 182 monedas en circulación en todo el mundo) y calcular cuál es el cambio respecto al euro. Podemos hacerlo en internet, donde existen algunos simuladores, o consultar en nuestro banco. También es conveniente preguntar en alguna sucursal de nuestra entidad cuál será la comisión que nos aplicarán al sacar dinero o pagar con sus tarjetas. La comisión por compras suele ser mucho menor que la de sacar dinero, pero algunos bancos incluso disponen de tarjetas sin gasto alguno para estas operaciones, sobre todo para jóvenes menores de 29 años.

Es muy distinto viajar dentro o fuera de la Unión Europea. En el caso de los tres países más visitados por los españoles, Francia, Italia y Portugal, lo más recomendable es pagar con tarjeta de crédito siempre que podamos. Pocos son los establecimientos que no las aceptan y las comisiones en los cajeros son altas (entre el 2,5% y el 5% del dinero retirado). Un reciente estudio elaborado por TNS Infratest para Mastercard concluye que los pagos electrónicos son la opción más barata para los españoles que viajan al extranjero. En este estudio se demuestra, por ejemplo, que lo más caro en Francia es sacar dinero en los cajeros. Las comisiones ascienden a 3,75 euros con una tarjeta de débito, 4 euros con una de crédito y 5 con una de prepago.

Por eso, y pensando en la seguridad, es recomendable llevar una cantidad pequeña de «cash» para el transporte público, por si se nos antoja comer en algún establecimiento rural que no admita tarjetas (cada vez son menos pero en el Algarve portugués, por ejemplo, todavía ocurre) o queramos comprar algún recuerdo en mercadillos callejeros. También es preferible haber reservado y pagado los hoteles por Internet previamente y llevar dos tipos de tarjeta distintos. Algunas compras on-line en Italia solo pueden hacerse con tarjetas nacionales y la mayoría de los supermercados en los Países Bajos aceptan pagos únicamente con la tarjeta Maestro.

Fuera de Europa

Lo primero que se ha de tener en cuenta cuando salimos de Europa es dónde nos saldrá mejor cambiar el dinero, si en España o en el país de destino. Lo menos rentable es cambiarlo en el aeropuerto. Si lo vamos a cambiar en España, lo idóneo es hacerlo en nuestro banco. Si lo vamos a hacer fuera, las dos mejores opciones son los bancos y las casas de cambio, aunque en los dos casos conviene armarse de paciencia y preguntar en dos o tres sitios distintos antes de hacerlo, las comisiones pueden variar mucho.

Estados Unidos es el mejor ejemplo de un país donde todo, hasta una chocolatina, se puede pagar con tarjeta de crédito. De hecho, incluso los comercios pequeños cobran con tarjeta y algunos no aceptan pagos en efectivo de más de 20 dólares. Por eso, llevar mucho dinero encima sería una imprudencia. Los bancos siguen siendo el mejor lugar para cambiar moneda, pero los de los núcleos rurales no suelen hacerlo. Los centros turísticos también ofrecen cambio, pero junto con los aeropuertos, son el lugar menos rentable.

En el caso de Asia, pongamos por ejemplo Tailandia por ser uno de los países más turísticos, lo mejor es cambiar los euros por bath (la moneda local) en una sucursal bancaria al llegar al país. El cambio es beneficioso porque todo es mucho más barato que en España. Un euro equivale a 39,08 bath y las comidas suelen costar, por persona, 350 bath de media. Aún así, las comisiones por pagar con tarjeta también son mínimas y prácticamente todas las tiendas, restaurantes y hoteles las aceptan.

En el caso de América Latina hay que tener en cuenta que el dólar tiene mucha más entrada que el euro. Si escogemos México como referencia, por ser también uno de los países más visitados, el mejor cambio de euro o dólar a peso se encuentra en los bancos, aunque no todos hacen este trámite. El país está lleno de casas de cambio, pero en los hoteles conocen los bancos donde hacerlo y es preferible atender a sus recomendaciones. Incluso así, siempre será más seguro pagar con tarjeta de crédito que plantarse frente a un cajero, pues los robos son muy habituales.

Como en todo, la previsión será clave para organizar bien el dinero durante unas vacaciones en el extranjero. Es muy importante diseñar un plan (aunque varíe), en el que contemplemos las comidas que tendremos que hacer fuera del hotel, el transporte público o taxis que necesitaremos y reservar un porcentaje para caprichos. De esta forma, evitaremos tener que visitar mucho los cajeros o volver con demasiado dinero en efectivo.

5 claves para pagar en el extranjero

- Pagar con tarjeta de crédito siempre que se pueda. Las comisiones no suelen ser muy altas y nos evitará quedarnos sin efectivo para servicios que sólo pueden pagarse en mano.

- Avisar al banco de que viajaremos al extranjero. Algunas entidades se reservan el derecho de bloquear nuestra tarjeta por si nos la han robado si detectan demasiados movimientos en el extranjero.

- Huir del cambio en los aeropuertos. Es el peor lugar para cambiar moneda. Es preferible hacerlo en España o en algún banco o casa de cambio del país de destino.

- Cuidado con las comisiones. Conviene informarse previamente de las comisiones que nos cobrarán en los cajeros o las compras con tarjeta de crédito.

- Cambiar el dinero justo. Es preferible quedarse corto porque el cambio de otras monedas al euro cuando volvamos a España suele ser negativo.