Banco Popular

Saracho asumirá la presidencia de Popular en el primer trimestre de 2017

La salida de Ron sienta bien al Banco Popular, que se dispara en bolsa más de un 13%

El presidente del Banco Popular, Angel Ron.
El presidente del Banco Popular, Angel Ron.larazon

Se estima que el proceso que conducirá a Saracho a la presidencia, «una vez aceptada su designación y adoptado el correspondiente acuerdo», concluya en el primer trimestre de 2017.

Emilio Saracho asumirá la presidencia del Banco Popular en el primer trimestre de 2017, una vez haya obtenido el visto bueno de la junta de accionistas, y será entonces cuando releve a Ángel Ron como primer ejecutivo de la entidad.

Según un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, Ron cesará en sus funciones actuales de presidente y miembro del consejo de administración en los primeros meses de 2017.

Aún así, desde ya, el máximo órgano de gestión de Popular ha acordado unánimemente agradecer a Ron "los servicios prestados, destacando su esfuerzo y determinación por conducir al banco a través de una crisis de duración y proporciones sin precedentes y solicitándole que, hasta su sustitución, siga dirigiendo el banco con la misma dedicación".

La noticia ha sido bien acogida por los mercados, ya que las acciones de Banco Popular en el Ibex 35 han subido por encima del 13%, alcanzando los 0,940 euros.

De este modo, Popular se ha consolidado como el mejor valor del Ibex 35 en una jornada en la que el selectivo ha cerrado con un retroceso del 0,22%, hasta los 8.669,2 puntos.

La noticia del relevo en la presidencia del banco ha impulsado el valor, que ha registrado la mayor subida del año y ha conseguido elevar el precio de las acciones a niveles de octubre, después de haber tocado el mínimo de 0,771 euros el pasado 28 de noviembre.

El volumen de negociación también se ha disparado en la sesión de hoy, en la que se han intercambiado más de 166 millones de acciones, frente a los 92,5 millones de ayer.

El analista de Self Bank Felipe López-Gálvez ha explicado a Europa Press que la sustitución de Ron "puede suponer un punto y aparte en la entidad, siendo fundamental que el banco empiece a recuperar parte de la confianza perdida en los últimos tiempos".

El experto ha señalado que el mercado "había perdido la fe"en que el presidente saliente fuera capaz de liderar el nuevo plan estratégico y ha argumentado que la caída del precio de la acción reflejaba esta desconfianza. "La imagen de Ron estaba ya muy desgastada", ha añadido.

Entre los problemas que tenía Popular se encontraban el hacer frente a los rumores de una posible fusión con Sabadell, la elevada posición de los bajistas o la posibilidad de una nueva ampliación de capital.

La propuesta se produce después de muchos rumores, que apuntaban al descontento de algunos consejeros, como la familia mexicana Del Valle o la consejera independiente Reyes Calderón, con la gestión de Ron, y con la pérdida de valor en Bolsa de la entidad, entre otras razones.

En los últimos días, el nombre de Saracho, hasta ahora vicepresidente de JP Morgan, ya estaba en todas las quinielas y parecía el candidato más probable.

De 61 años, Emilio Saracho se incorporó a JP Morgan en 1998 procedente del Banco Santander, y fue nombrado director de banca corporativa y de inversión para Europa.

Se impone así el candidato que en los últimas días había sonado como el favorito de la familia del magnate mexicano Antonio del Valle, titular del 4,25 % del capital del banco y partidario de la fusión de Popular con otro competidor.

El apoyo del expresidente de Banco Pastor José María Arias y de la consejera independiente Reyes Calderón ha sido decisivo para forzar la salida de Ángel Ron de la presidencia de Popular, a la que llegó en 2004, tras la renuncia de Luis Valls Taberner.

A pesar de que recientemente el consejo de administración del Banco Popular respaldó la continuidad de Ron, el sector crítico ha logrado convencer al resto de los miembros del máximo órgano de gestión, abrumado por la fuerte caída en bolsa de la entidad.

En el sector financiero se daba por descontada el relevo en la presidencia del Banco Popular y se barajaban distintos candidatos para el puesto, entre ellos, el del ex consejero delegado de CaixaBank Juan María Nin o el presidente de Sareb, Jaime Echegoyen.

Sin embargo finalmente el elegido, que ahora deberá ratificar una junta de accionistas, ha sido Saracho, muy reputado en el sector y consejero delegado de banca privada de JP Morgan para Europa, Oriente Medio y África desde 2008, además de presidente de la firma para España y Portugal.

La llegada del nuevo ejecutivo abre una etapa en principio más tranquila en el consejo de administración del Popular, donde se ha vivido una auténtica “guerra” en las últimas semanas entre los partidarios de Ron y sus detractores, según fuentes próximas.

Ahora falta por saber si el nuevo presidente traerá consigo un nuevo equipo o conservará al consejero delegado, Pedro Larena, nombrado también por sorpresa el pasado 29 de julio, el mismo día en que la entidad presentaba al mercado las cuentas correspondientes a la primera mitad de este convulso ejercicio.

Uno de los grandes retos de Saracho será recuperar la confianza del mercado, pues la acción ha llegado a perder un 70 % de su valor este año por el acoso de los inversores, que apuestan a la baja y por las dudas que generaba el futuro de la entidad tras anunciar en mayo una macroampliación de capital de 2.500 millones.

Además, el nuevo presidente tendrá que decidir si sigue adelante con el plan de negocio diseñado por el anterior equipo, que prevé desprenderse de 15.000 millones de euros en activos improductivos antes de 2018, ayudado por la creación de un “banco malo” con 6.000 millones de euros en inmuebles adjudicados.

Era la gran apuesta de Ron para sanear la entidad y quería que estuviera en marcha a principios de 2017, momento en el que saldría a bolsa y permitiría a los inversores apreciar la fortaleza del negocio bancario puro, en el que Popular aún gana 1.000 millones de euros al año y mantiene el liderazgo en el negocio de pymes.

Mientras se resuelven estas incógnitas, los inversores celebran en bolsa el ansiado relevo en la cúpula de la entidad, que se anota una subida cercana al 13 % poco antes de la apertura de Wall Street.

Nacido en Madrid en 1955 y licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Complutense de Madrid, Saracho inició su trayectoria profesional en 1980 en el Chase Manhattan Bank, donde fue el responsable de las actividades en sectores como gas y petróleo.

Años más tarde, participó en la creación y desarrollo del Banco Santander de Negocios, donde lideró la división de Investment Banking y en 1989 fue nombrado responsable de la división de Grandes Empresas del Grupo Santander y director general adjunto.

Ya en 1990 trabajó para Goldman Sachs en Londres, como corresponsable de las operaciones españolas y portuguesas, y en 1995 regresó a Santander Investment como director general responsable del área de Investment Banking a nivel global.

Se incorporó al banco de inversión JP Morgan en 1998 como presidente para España y Portugal y actualmente es además consejero de empresas del IBEX 35 como Inditex o IAG.