Macroeconomía

Las pensiones elevan la deuda de la Seguridad Social a nivel récord: 106.000 millones en 2022

El agujero público supera los 1,5 billones y aumenta en 75.000 millones en un año. Los préstamos realizados por la Tesorería del Estado salvan el pago de las pensiones pero elevan los números rojos un 200% desde que Sánchez es presidente

El presidente del gobierno, Pedro Sánchez
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, durante la sesión de control al Gobierno en el CongresoAlberto R. RoldánLa Razón

El mayor gasto público de la historia, que ha provocado el agujero más profundo de las finanzas de la Administración desde que se tienen registros oficiales. Esa es la conclusión a la que llegan los números de cierre del último ejercicio publicados ayer por el Banco de España, que ha elevado la deuda del conjunto de las administraciones públicas hasta los 1,502 billones de euros, con un incremento de más 75.000 millones, un 0,5%, solo en el último año y unos números rojos acumulados desde el cierre de 2019 –la última cifra justo antes de las distorsiones causadas por la pandemia– de casi 280.000 millones, un 22,8%, pese a que en diciembre se logró rebajar dl máximo histórico de noviembre (1.505.538 millones).

El cierre de diciembre avanzado por el supervisor, colocó la deuda en el 113,1 % del PIB, que se sitúa por debajo de la referencia establecida por el Gobierno n el Plan Presupuestario para el conjunto del ejercicio, que era del 115,2 % del PIB, lo que se traduce en una caída de 5,2 puntos con respecto al año anterior. «Se trata de la mayor reducción del endeudamiento de las Administraciones Públicas registrada en la historia reciente», destacaron desde el Ministerio de Asuntos Económicos que dirige Nadia Calviño». Sin embargo, obvian que esta reducción ha llegado casi únicamente gracias al efecto que la inflación tiene sobre esta magnitud macroeconómica, no al ajuste en el gasto público, que se disparó en torno al 5% el último año. También ha tenido que ver el despegue de la economía, que se expandió un 5,5% sobre el PIB –según el dato adelantado por el INE– y enmendó el incremento de la deuda, que aumentó un 5,4% durante el ejercicio pasado. Esta reducción se produce apenas dos años después de que la deuda aumentase en 22,2 puntos sobre el PIB como consecuencia de la crisis sanitaria. En 2021, cayó 2,1 puntos, por lo que la deuda está todavía a casi 15 puntos de los niveles prepandemia.

Más allá de la progresión positiva respecto al PIB –tras la caída de 3.033 millones desde el récord marcado en noviembre–, las cifras totales revelan que la deuda cerró 2022 por primera vez en la historia por encima del billón y medio de euros, un nivel que alcanzó por primera vez el pasado mes de septiembre. La mayor parte de esta deuda volvió a acumularse en el Estado, que cerró en 1,331 billones de euros tras sumar 86.261 millones en el año, un incremento del 6,2%. Las comunidades autónomas aumentaron su endeudamiento en 4.265 millones (un 1,3%), hasta situarlo en 316.853 millones. Por último, las corporaciones locales elevaron su deuda en diciembre, un 3,9% respecto al mes de noviembre, hasta los 23.066 millones de euros, mientras en tasa interanual se incrementó un 4,5%.

Capítulo aparte merece la deuda de la Seguridad Social, que se situó en 106.178 millones, dos millones por encima de la cifra de hace un mes y un 9,3% más que un año antes, que la mantienen por encima del umbral récord de los 100.000 millones. Este incremento se debe de nuevo a los préstamos concedidos por el Estado a la Tesorería General de la Seguridad Social para financiar su desequilibrio presupuestario, básicamente para afrontar el pago de las pensiones, que ha disparado el gasto mensual de esta prestación hasta rozar los 11.000 millones mensuales. Así, el crecimiento total de los números rojos durante 2022 alcanzó casi 9.000 millones –desde los 97.185 millones contabilizados en enero hasta los 106.178 con los que cerró diciembre–, pero se eleva hasta los 12.324 millones si se compara con el mismo mes de 2021, un 13% más.

Unas cifras que se quedan cortas si se echan cuentas desde que Pedro Sánchez es presidente del Gobierno, ya que la deuda de la Seguridad Social se ha multiplicado por tres (+202%), pasando de 35.000 a 106.000 millones de euros, 71.000 millones más. Un agujero que no va a menguar en el presente ejercicio, al tener que crecer al mismo ritmo que lo va a hacer el gasto en pensiones, que este año se han elevado el 8,5% aprobado por el Ejecutivo. Para cuadrar estas cuentas, el Gobierno tendrá que volver a recurrir masivamente este año a los mercados para obtener una financiación bruta récord de 256.846 millones –de los que 70.000 millones serán de endeudamiento neto–, con los que afrontar el mayor gasto histórico presupuestado por un Gobierno en España.