Productos frescos: estos son un lujo para la mitad de las familias

El encarecimiento de los alimentos es una realidad que lleva afectando durante años a los bolsillos de miles de familias en nuestro país. Y es que el precio ha sido el principal factor que ha influenciado en la toma de decisiones de los españoles para llenar la cesta de la compra. Tanto es así, que tres de cada cuatro hogares se han visto obligados a reducir su gasto en otros productos y servicios para poder seguir haciendo frente a la compra; apostar por productos de marca blanca o incluso tener que restringir el consumo de ciertos alimentos.

Tanto es así, que la mitad de los hogares españoles tiene dificultades para comprar productos frescos como carne o pescado, y para dos de cada cinco es muy complicado pagar la comida, tal y como desvela el Índice de Solvencia Familiar de la Organización de Consumidos y Usuarios (OCU). De esta forma, denuncian que comprar alimentos frescos se ha convertido en un "lujo" para el 50% de las familias en España.

Este indicador no solo muestra las dificultades de las familias para afrontar los elevados precios de la alimentación, sino también en otros ámbitos como el hogar y vivienda; los cuidados de la salud; la educación; la movilidad y transporte; o el gasto en cultura, ocio o tiempo libre.

El Índice de Solvencia Familiar se situó en 2018 en 46,2 (sobre 100) en nuestro país, y pese a su mejora los dos años siguientes, en 2021 se desplomó y siguió cayendo en 2022, situándose en un 45,8, el peor dato de la serie. En 2023 la situación mejoró levemente respecto al año previo hasta situarse en un 46.

Aunque las previsiones de los hogares son mejores que hace un año, todavía uno de cada tres piensa que le irá peor este 2024. Además, siete de cada diez familias considera que vive peor y casi el 10% ha tenido "graves dificultades" para afrontar sus gastos en el último año.

En esta línea, el número de familias que tienen algunas dificultades para cubrir los gastos esenciales también ha crecido en el último año, que ha pasado del 61% al 63%. Por todo ello, a tres de cada cuatro hogares les resulta difícil o imposible ahorrar; mientras que solo el 8% puede hacerlo de manera más o menos relajada.

Gastos difíciles de afrontar

El año pasado, la mitad de las familias tuvieron dificultades para afrontar los gastos de la vivienda como pagar la hipoteca o el alquiler, así como los suministros.

Concretamente, las partidas de gasto analizadas más difíciles de afrontar en 2023 por parte de las familias fueron la de alimentación –alimentos frescos como carne y pescado–, el pago de la hipoteca, ya que la subida del euríbor disparó estos créditos a tipo variable; y el del alquiler. Asimismo, también es cada vez más complicado costear actividades de ocio como una escapada o un viaje más largo.

Madrid, Cataluña y Andalucía, las comunidades con menor solvencia familiar

Aquellos que tienen mejor situación son una pareja jubilados, una unidad familiar de dos personas (34%) y un joven trabajador que viva solo (32%). En cambio, las familias lo tienen mucho más complicado, sobre todo cuando hay varios hijos, alguno de los miembros está desempleado o son familias monoparentales.

Navarra, Aragón, Cantabria, La Rioja, Cantabria y Extremadura son las comunidades con mayor solvencia familiar. Por el contrario, Cataluña, Madrid y Andalucía son las autonomías donde más sufre la economía de las familias. Por su parte, Navarra y Aragón son las que más han mejorado en su conjunto y, por el contrario, destaca la fuerte caída en la solvencia familiar de Cataluña y el País Vasco, debido a la mayor dificultad para hacer frente a los gastos corrientes por parte de sus habitantes.

Ante este escenario, la OCU considera que es necesario que se prorroguen y amplíen las ayudas existentes; ya que las adoptadas hasta el momento son "insuficientes". En concreto, pide que la eliminación de impuestos energéticos sea definitiva; que se baje el IVA de la carne y el pescado; que se faciliten los acuerdos de las familias con dificúlteles con entidades bancarias; y que se incremente la cuantía y el número de beneficiarios de los cheques de 200 euros.