Transporte ferroviario
Puente cree que es normal que haya viajeros de tren "tirados" todos los días
El ministro dice que es «inherente a redes de gran extensión y complejidad» como la española
Óscar Puente se valió el domingo de la red social X, en la que se prodiga tanto para opinar como para atacar o defenderse de sus detractores y los del Gobierno; para hacer una encendida defensa de la red de alta velocidad en general y de la línea Madrid-Andalucía, triste protagonista de varios percances en los últimos meses -el último, el fin de semana-, en particular. Puente, que no rehúye el cuerpo a cuerpo, tampoco lo hizo en esta ocasión y respondió a varios mensajes de usuarios, incluida la pregunta «¿Lo normal es que viajeros queden tirados todos los días sin excepción?» .
«Sí. Es lo normal en todas las redes ferroviarias avanzadas y de gran extensión y complejidad. Entre otras cosas porque hay factores no solo internos, sino externos que provocan incidencias. Este verano una de cada cuatro incidencias se ha debido a factores ajenos a la infraestructura y los trenes. (incendios, arrollamientos de cosas o personas, robos de cable, etc.)», contestó el ministro.
Puente, como ha hecho estos días en sendas entrevistas en Efe y Radio Nacional, volvió también a repetir que no hay fallos generalizados y que la situación del sistema no es comparable a la de los años 90, cuando sólo funcionaba el corredor andaluz y con apenas seis circulaciones diarias.
Pese a los incidentes que está registrando la red, el ministro aseguró a otro usuario que le preguntó si la red está preparada para soportar el tráfico actual que sí lo está. «Pero también está mucho más tensionada y requiere de un mayor y mejor mantenimiento», según admitió.
Triple causa
En la entrevista que ayer concedió a Radio Nacional, Puente insistió en el argumentario del Gobierno para justificar el incremento de incidencias en la red ferroviaria: el mayor número de trenes en circulación, lo que satura la red; los continuos fallos de los trenes, y la mayor cantidad de obras en las vías, lo que impacta directamente en el servicio.
«Cuando se habla de la década de los 90, estábamos en el millón de usuarios y había solo seis trenes por día entre Madrid y Sevilla. Hoy, con casi 50 millones de viajeros, en algunos puntos pasan 289 trenes al día. Si se para un tren, hay otros diez detrás y otros diez en el otro lado en una franja de 45 minutos. En los años 90 se paraba un tren y había tres horas de margen. Ahora no», explicó.
En cuanto a las obras, recordó que en países como Alemania el 50% de los trenes llegan con más de 15 minutos de retraso y, cuando se hacen determinadas obras, se cortan las líneas, cosa que no se hace en España.