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Transporte aéreo

¿Un sólo piloto en la cabina de un avión? Europa aprecia riesgos para la seguridad y los pilotos celebran la paralización del plan

La Agencia Europea de Seguridad Aérea (Easa) considera que la tecnología no está lo suficientemente madura para ofrecer todas las garantías

Interior de una cabina de un avión de Boeing larazon

Los pilotos de aviación respiran aliviados... de momento. Los planes de algunos fabricantes y aerolíneas para eliminar a uno de los pilotos de las cabinas de vuelo no está lo suficientemente maduros como para implementarse, según ha concluido la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA) en su informe final tras la investigación sobre los riesgos de seguridad que representaría volar con un solo piloto en cabina.

El análisis ha concluido que en las operaciones con tripulación mínima (eMCO, por sus siglas en inglés) y con un solo piloto (SIPOs, también por sus siglas en inglés) no se puede demostrar un nivel de seguridad equivalente con los vuelos de dos pilotos, teniendo como referencia el diseño actual de la cabina de los aviones.

Para la EASA, antes de avanzar por esta vía, es "necesario" desarrollar la tecnología de la cabina y realizar más investigaciones antes de explorar su viabilidad.

"A más largo plazo, la presencia de una cabina inteligente con funciones novedosas de alivio de la carga de trabajo, con supervisión del rendimiento, el estado de alerta y la capacitación de la tripulación de vuelo y con una solución para prevenir las amenazas a la seguridad puede tener el potencial de sentar las bases de nuevos conceptos operativos", según la agencia europea.

Desde que algunos fabricantes comenzaron a explorar la posibilidad de sustituir a parte de la dotación de pilotos por inteligencia artificial, los pilotos emprendieron una cruzada para frenar los planes.

Sus impulsores defienden que el sistema optimizaría la productividad

Airbus, por ejemplo, ha defendido que la reducción de tripulación podría optimizar la productividad, especialmente en vuelos de larga distancia, donde un solo piloto operaría el avión en periodos de bajo tráfico aéreo, mientras el copiloto descansa. Esto, según el consorcio europeo, no implicaría un vuelo completamente autónomo, sino una operación controlada y supervisada por humanos, respaldada por sistemas tecnológicos de última generación.

Para los pilotos, sin embargo, la reducción de pilotos conllevaría un detrimento evidente de la seguridad. Entre los riesgos identificados por el principal sindicato español del gremio, el Sepla, destacan la carga de trabajo adicional para el piloto en cabina y la eliminación de la supervisión mutua, la comprobación cruzada y la redundancia operativa que proporciona un segundo piloto.

Además, el sindicato, que ayer celebró la paralización del proyecto, destaca la importancia que tienen la mentoría y la transferencia de habilidades para los pilotos en un entorno de tripulación múltiple, una práctica esencial que se vería comprometida con la implementación de eMCO.