Reino Unido

La extensión del «corralito» en Reino Unido hunde las bolsas

Henderson Global Investors, Columbia Threadneedle y Canada Life son las tres últimas en anunciar la suspensión de la negociación de fondos inmobiliarios

Imagen del centro financiero de Londres (Reino Unido).
Imagen del centro financiero de Londres (Reino Unido).larazon

Henderson Global Investors, Columbia Threadneedle y Canada Life son las tres últimas gestoras en anunciar la suspensión de la negociación de fondos inmobiliarios en Reino Unido, elevando a seis el número de entidades que en menos de 48 horas han aplicado este 'corralito'.

El horizonte en los mercados no sólo no termina de despejarse sino todo lo contrario. Aunque nada ha cambiado desde que se conoció el resultado del referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea, los inversores tienen el miedo metido en el cuerpo ante un proceso desconocido de desconexión, que ni siquiera tiene fecha de comienzo. La libra sigue marcando mínimos desde mediados de los ochenta, las bolsas ahondan sus pérdidas, los bancos tiemblan y el mercado inmobiliario británico, que ha sido el sostén de Londres en los últimos años, se prepara para un más que previsible desplome de los precios. En este mar de confusión, sólo el bono alemán (y el de sus aliados en el BCE) y el oro viven días de esplendor, al convertirse en valores refugio del dinero.

En apenas dos semanas, las que se cumplen hoy desde el 23-J, la libra se ha dejado un 11,83%. De rozar los 1,50 dólares ha pasado a cotizar por debajo de los 1,30. Ayer, en la madrugada española, llegó a perder los 1,28. Los analistas habían descontado una caída del 10% en el caso de que los electores votaran la salida de la disciplina de Bruselas. La realidad ha superado las previsiones.

Bancos y vivienda

La situación de la divisa británica tuvo por fin su traslación a la bolsa de Londres, que ayer parecía ajena a todo. El FTSE perdió un 1,25% después de que otros tres fondos de inversión bloquearan sus activos inmobiliarios en Reino Unido por temor a una retirada masiva de fondos por parte de los inversores. El «corralito» se extiende ya a seis firmas: Henderson Global Investors, Canada Life, Columbia Threadneedle, M&G Investments, Aviva y Standard Life. Entre todos ellos disponen de más de 17.000 millones de euros, una cantidad no muy significativa, pero que marca la tendencia de lo que puede suceder en los próximos días. El rumor sobre la imposibilidad de que algunos fondos puedan reembolsar el dinero a sus inversores se empieza a extender y la preocupación por una caída generalizada de los precios de inmuebles se apodera de los inversores. Para los responsables de estos fondos, aplazar las solicitudes de reembolso permite proteger los intereses del conjunto de partícipes, ya que permite ganar tiempo para realizar una venta ordenada de activos.

Ante esa posibilidad, el dinero salió de los valores bancarios, lógicamente los más expuestos al sector inmobiliario, toda vez que son los que financian las operaciones de empresas y particulares. Las acciones de Lloyd’s cayeron un 6,8%, en línea con la de Royal Bank of Scotland (-6,06%). Barclays cedió un 3,1% y sólo HSBC, considerado el banco más global del mundo, aguantó el tipo, aunque no pudo eludir las pérdidas (-0,63%).

La caída de la bolsa de Londres no fue un hecho aislado ayer. Todos los parqués europeos vivieron una nueva jornada de pérdidas, con Milán a la cabeza. La bolsa italiana se dejó un 2,26%. La difícil situación por la que atraviesa su sistema financiero es un plus de riesgo para los inversores, a pesar de que, en la sesión de ayer, Monte dei Paschi di Siena cerrara con una ganancia del 6,07%. El descalabro de los días previos (una caída del 32,67% en dos jornadas) ha convertido en atractivo el precio de compra, que ayer se situó en 0,28 euros. El resto de la banca transalpina sigue bajo la lupa y en números rojos. La Banca Popolare de la Emilia Romagna encabezó las caídas, con una pérdida del 7,14%, seguido de Banco Popolare (-6,15%). De nada sirvió el llamamiento de Matteo Renzi a la calma, asegurando que los problemas por los que atraviesa el sistema financiero del país no deben preocupar a los ahorradores porque son dificultades que atañen «a los accionistas. Los ahorradores y los depositantes no tienen ningún problema y para mí esa es la prioridad».

Tercer día en rojo del Ibex

En España, el Ibex cerró su tercera jornada consecutiva a la baja. Ha perdido el nivel de los 8.000 puntos, un 16,95% de su valor de mercado en lo que va de año y un 10,79% (995 puntos) desde el anuncio del Brexit. Y eso que sólo tres (Popular, Bankia y Sabadell) de los siete bancos que cotizan en el índice estuvieron entre los diez valores que más perdieron. IAG, un día más, marcó el peor registro de la sesión, con un retroceso del 7,47%. El hecho de ser el resultado de una fusión con una empresa británica (British Airways) pesa como un lastre en la cotización. Para que todo resultara más negativo, el barril de petróleo reculaba y cerraba en 47,7 dólares para el crudo de referencia en Europa, el Brent.