iFP prepara a sus alumnos para la empresa de hoy

Cuanto más pegada está la formación que reciben los alumnos a lo que esperan (y necesitan) las empresas que contratan a los empleados, más beneficios obtienen empleador y empleado. Este es el hito que consiguen los alumnos de iFP (Innovación en Formación Profesional), la Formación Profesional de Grupo Planeta que está redefiniendo el sector de la Formación Profesional en nuestro país.

Para conseguir esta formación que las empresas necesitan y los alumnos esperan, iFP se sustenta en tres pilares que garantizan este aprendizaje no solo teórico, sino práctico. El primero de ellos es el activo más importante: profesores expertos en cada una de sus áreas de especialidad. La gran mayoría compagina su labor pedagógica con su actividad profesional lo que ofrece un valor añadido al estudiante, dado que su profesor tiene el conocimiento y puede transmitir de primera mano qué es lo que las empresas esperan. Además, estos profesionales tienen las habilidades blandas asociadas a la enseñanza, como la pedagogía. En segundo lugar, y como parte de su ADN, la formación en iFP se diferencia por su contacto directo con las empresas, jugando estas un rol activo en la formación de los estudiantes, y colaborando/que va más allá del famoso módulo de FCT, las prácticas obligatorias. Este contacto directo con empresas permite adaptar la formación a las necesidades cambiantes que experimentan los proyectos en cada momento, y por eso, la formación también incide en el desarrollo de competencias digitales, habilidades profesionales y personales o el refuerzo del inglés.

El ratio de empleabilidad de los alumnos que pasan por la formación de iFP es del 90%

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Como resume Mireia Nilo, Directora de Académico de iFP, «en iFP, nos enfocamos en preparar a nuestros alumnos para el mundo laboral actual y futuro. Nuestra formación está basada en contar con profesores expertos, tener un contacto directo con empresas referentes y que nuestra metodología se base en un enfoque práctico para garantizar alta empleabilidad».

En la actualidad son más de 1.600 las entidades que colaboran para amoldar esta formación a la realidad de la economía, participando en la formación con talleres prácticos, visitas y masterclases y visitas a empresa. Las actividades inter-ciclo tienen un impacto tangible y de aplicabilidad de la profesión dado que estas se desarrollan en los campus y aprovechan todos los recursos y equipamiento profesional en aulas que simulan entornos profesionales reales.

iFP también da mucha importancia al compañerismo y al aprendizaje horizontal que tiene lugar entre los profesionales. Por eso, en iFP alumnos de diferentes ciclos participan en proyectos con el fin de trabajar en equipo y adquirir habilidades tanto personales como profesionales, más allá de lo teórico o hard skills.

Es más, iFP cuenta con diferentes iniciativas para promover la inclusión y la igualdad de oportunidades, dado que está comprometida a contribuir a que la formación profesional esté al alcance de cualquiera y facilita que todos los alumnos pueden solicitar becas, así como pedir un apoyo continuo, con un acompañamiento personalizado a todos los alumnos como otra de las señas de identidad de iFP.

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Las compañías participan en la formación de los alumnos con talleres, visitas y marterclases

Es una manera activa de que el reciclaje y constante aprendizaje se dé entre quienes pasan por las aulas de iFP. Por eso también da mucha importancia a las certificaciones en competencias digitales así como a las habilidades profesionales y personales e idioma inglés. La formación se desarrolla en los seis campus que posee iFP, todos dotados con tecnologías, recursos y softwares profesionales. Estas herramientas son las mismas que los alumnos deberán saber utilizar cuando abandonen las aulas y se integren en el mercado laboral. Estos campus están en puntos estratégicos y céntricos de Barcelona y Madrid, a los que se puede acceder tanto en transporte privado como público. Además, iFP tiene un campus virtual y plataformas de aprendizaje flexible de última generación, de manera que los alumnos pueden acceder, a través de una app (disponible en iOS y en Android) a este aprendizaje a distancia. La app permite consultar y consumir el contenido dado en clase y acompañarlo de otros recursos adaptados a su ciclo de estudio, lo que permite que se pueda seguir aprendiendo al mismo tiempo que ya se está trabajando.

Según los datos extraídos por la propia institución, el 97% de las empresas colaboradoras están muy satisfechas con la preparación de los alumnos que llegan de iFP.