Congreso

Podemos busca ocultar las cesiones en los PGE con sus tres leyes estrella

La ley de bienestar animal, trans y del aborto se expondrán hoy a examen en el Congreso

No ha sido una semana «horribilis» para Podemos, pero casi. Es por ello que esperan a las votaciones de hoy en el Congreso de los Diputados para remendarlo, pero sin todas las garantías. La negociación presupuestaria no ha lucido electoralmente como esperaban y el socio minoritario en Moncloa se ha quedado sin avances destacables que vender a su electorado. Ni la ley de vivienda se ha desbloqueado, ni la ley de seguridad ciudadana y solo un compromiso de la tramitación por la vía de urgencia de la ley de familias, en la que el ministerio de Derechos Sociales busca la proyección de la ministra Ione Belarra. También el avance en reforma fiscal se arrogan los morados, a pesar de que Moncloa la desbloqueó a última hora como contrapeso a las bajadas fiscales del PP. Sin embargo, su oposición al aumento de gasto en Defensa el mismo día, oficializado con órdago incluido al PSOE –con amenaza de ruptura– acabó desluciendo los avances conseguidos en materia de protección social. Y con ello, los argumentos y logros para vender de cara al ciclo electoral ante el electorado más anti-Otan y al recabado en los colectivos sociales que empujan para desatascar Vivienda.

Pero los morados se agarran a la ley de la segunda oportunidad. «Esta semana es un ejemplo de para qué sirve que Unidas Podemos esté en el Gobierno», vaticinaba el martes el portavoz Pablo Echenique. Y es que, el Congreso discutirá hoy las enmiendas a la totalidad de los proyectos de ley de bienestar animal –que promueve el ministerio de Derechos Sociales– la ley trans y la reforma de la ley del aborto, estas dos últimas impulsadas por Igualdad. Los morados deberán superar este examen con éxito con el objetivo de hacer de las tres leyes bandera durante lo que queda de legislatura y rebajar así las pérdidas en los Presupuestos. Son, de hecho, pocas de las leyes que queda a los morados por tramitar y a las que confían su rentabilidad. Leyes que han dividido gráficamente a la coalición. Todas de carácter social, vinculada a las banderas moradas, pero las cuales el PSOE no quiere ceder.

Las tres leyes tendrán que superar enmiendas a la totalidad, pero sobre todo peligra la de bienestar animal porque el PNV, socio del Gobierno, también quiere tumbarla. Al cierre de esta edición, según explicaban desde el partido nacionalista vasco, no había negociación para retirar su enmienda y, por tanto, se votará este jueves junto a las de PP y Vox. A partir de ahí, hay que hacer cálculos y podría lograr tener apoyos suficientes: entre las tres formaciones suman 146 diputados. Para llegar a la mayoría se requieren 176, es decir, 20 más. La ley ha provocado un serio debate en el PSOE por la legislación que afecta a los perros de caza, de hecho plantean una enmienda parcial que pone en jaque la ley, puesto que los morados estudian no apoyar el texto que ha salido de su propio ministerio. En este sentido, Coalición Canaria (2) y Foro Asturias (1) ya tienen el voto decidido y apoyarán la enmienda a la totalidad: por lo tanto, quedarían otros 17. Otros partidos, como Ciudadanos (9), JxCat (4), PDeCat (4), UPN (2), Partido Regionalista de Cantabria (1) O Teruel Existe (1) siguen sin tomar una decisión: entre estos, suman 21 escaños, suficientes para tumbar la ley de Belarra. A ellos hay que sumar al diputado independiente Pablo Cambronero, que normalmente vota alineado con PP y Vox.

En su enmienda, el PNV aduce que la ley es «centralizadora» e «invade de forma incontestable las competencias autonómicas del País Vasco». Por su parte, el PP reprocha que el proyecto legislativo no cuenta con el consenso de los actores afectados ni está orientado a luchar contra prácticas ilegales y pone en duda la constitucionalidad. Vox ve un «disparate» dar derechos a los animales y considera que pretende imponer obligaciones y restricciones «ajenas al sentido común».

La ley del aborto y la ley trans también han recibido enmiendas a la totalidad de PP y Vox, pero se antoja muy complicado que puedan prosperar porque, al fin y al cabo, quien suele decantar la balanza para que el Gobierno pueda perder una votación son los socios y, en este caso, ninguno de ellos parece dispuesto a votar a favor de la devolución de ambos textos legislativos. No se descarta, que ambas leyes puedan contar con escollos en la comisión de Igualdad, donde el PSOE sí se ha abierto a cambios, de la mano de la presidenta de la Comisión, la exvicepresidenta Carmen Calvo.

En el ala morada quieren pisar el acelerador antes de que acabe el año para cumplir la agenda legislativa, al entender que 2023 estará marcado por las elecciones y por la presidencia europea que le corresponde a España.