Relevo en el PP

Ayllón y Báñez, símbolos de la integración

Ayllón y Báñez, símbolos de la integración
Ayllón y Báñez, símbolos de la integraciónlarazon

La toma de contacto entre Pablo Casado y Soraya Sáenz de Santamaría continuó toda la tarde en el Congreso entre sus «primeros espadas». Por parte de Casado, Javier Maroto y el diputado Teodoro García; del lado de Sáenz de Santamaría, Fátima Báñez, a quien señaló como su futura secretaria general, y José Luis Ayllón. Estos dos últimos nombres son fundamentales para medir el alcance del mantra de la integración.

La negociación afecta no sólo a la estructura orgánica de Génova, sino también de los grupos parlamentarios y de las candidaturas electorales para los comicios de 2019. En paralelo a estas conversaciones, el nuevo equipo que ha tomado las riendas de Génova también ha tenido que negociar con María Dolores de Cospedal. Y esto ha hecho más difícil el encaje, porque desde la candidatura de Sáenz de Santamaría han exigido que no se premie a la lista que ya quedó derrotada en la votación de las bases. De momento, los «notables» de Cospedal entraron en el Comité Ejecutivo, en el que no hay nadie del equipo de Sáenz de Santamaría al votarse las dos listas, la de Casado y la de la ex vicepresidenta, en el cónclave. En la mesa de negociación ha estado, por tanto, la exigencia de que el equipo de la ex vicepresidenta no tenga en ningún caso una representación que no sea proporcional a su resultado en el Congreso ni inferior a la de las candidaturas «perdedoras».

El éxito de Casado se sostuvo en la alianza anti-Soraya de todos los otros candidatos que optaron a la sucesión de Rajoy y en las sinergias que había dentro del partido contra la que fue mano derecha de Rajoy en el Gobierno y en el partido. Sobre el futuro de Sáenz de Santamaría, fuentes de su equipo precisaron que «sigue, y hemos quedado en que es lo último que cerraríamos». Su nombre ha sonado para la candidatura por Madrid.

El objetivo de Pablo Casado ahora es conformar un equipo y un proyecto en el que «todos se sientan representados», y en el que la unidad es «absolutamente imprescindible», y la quiere a todos los ámbitos.

El líder del Partido Popular reiteró que quiere contar con personas de la lista de la ex vicepresidenta que forman parte de órganos provinciales o regionales, si bien indicó que esto no es una negociación de un «pacto investidura entre adversarios políticos», sino un acuerdo «entre compañeros» que tendrá que ratificar el Comité Ejecutivo.