Guipúzcoa

Aznar revela que "un concejal de Batasuna guardaba en el ayuntamiento" el misil que se lanzó contra su avión

Fue escondido en un local del consistorio de Lizarza (Guipúzcoa)

La banda terrorista ETA intentó asesinar al expresidente del Gobierno, José María Aznar en cuatro ocasiones. En una de ellas intentó repetir el atentado de Carrero Blanco contra él donde, informes internos de la banda explican la forma con la que planearon minuciosamente la acción criminal y las razones por las que fallaron en su intento. Un portero "cotilla" estuvo a punto de desbaratar sus planes.

Aznar ha revelado este miércoles que "un concejal de Batasuna guardaba en los almacenes del ayuntamiento" de Lizarza, en Guipúzcoa, el misil que se lanzó contra su avión en uno de los cuatro atentados perpetrados contra él cuando estaba al frente del Ejecutivo de la Nación.

Lo ha recordado durante un coloquio junto al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, desde el centro cultural Emilia Pardo Bazán, en Colón. Allí ha explicado cómo "Sortu es el partido que se legaliza, a las elecciones se han presentado siempre los batasunas". "Lo sabré yo, que de los cuatro intentos de atentados, uno estuvo a punto de consumarse, y otros tres fueron lanzamiento de misiles en el avión donde yo iba, informa. Según ha revelado los misiles los guardaba un concejal de Batasuna en los almacenes del ayuntamiento de un pueblo de Guipúzcoa donde después fue alcaldesa Regina Otaola (PP)", ha explicado a continuación.

Por ello ha preguntado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez,"por qué, señor jefe del Gobierno, pacta con ellos, ¿por qué? porque si no, no es presidente del Gobierno. Pedro Sánchez garantizó que va a volver a pactar con Bildu", informa Ep.

Un misil SAM-7

El misil al que se refiere José María Aznar fue escondido en un local del ayuntamiento de Lizarza por un comando de ETA al que pertenecía Pedro María Olano, que fue detenido en enero de 2010. Allí se habría guardado un misil SAM-7 y un lanzamisiles comprado por la banda terrorista con el objetivo de asesinar a Aznar en la campaña de las elecciones vascas de 2001.

Pedro María Olano, que ya había sido condenado por amenazar de muerte a la alcaldesa Regina Otaola, fue detenido inicialmente por un delito de colaboración con ETA, pero confirmó en su declaración ante la Guardia Civil lo que habían dicho dos etarras en Gara, asegurando que la banda terrorista había intentado atentar hasta en tres ocasiones contra el ex presidente español.

También indicó a los agentes del Instituto Armado el local del Ayuntamiento en Lizarza y dos zulos en montes cercanos, como los lugares en los que guardaba explosivos de la banda terrorista.

El ahora ministro y entonces juez Marlaska envió en aquel momento a prisión a Pedro Olano por integración en ETA, depósito de armas de guerra y explosivos y por atentar contra el entonces jefe del Ejecutivo, tras constatar que el etarra había hecho entrega en tres ocasiones de un lanzamisiles a comandos de ETA. Sin embargo, en las tres ocasiones éste artefacto fue devuelto porque no había funcionado.

Según el auto del juez Marlaska, el primer traslado se produjo coincidiendo con la visita de Aznar al Palacio Euskalduna de Bilbao donde participó el 29 de abril de 2001 en el inicio de la campaña. La segunda vez, el material se entregó en Oiartzun (Guipúzcoa) para aprovechar la presencia del expresidente en un acto en el Kursaal de San Sebastián el 4 de mayo y la última entrega fue en Burgueta (Álava), con motivo del cierre de campaña al que asistía Aznar en el polideportivo Sansomendi de Vitoria el 11 de mayo.

Dos de los intentos de asesinato contra el actual presidente de la Fundación FAES se produjeron en los aeropuertos de Fuenterrabía (Guipúzcoa) y de Foronda (Álava), según informó entonces Alfredo Pérez Rubalcaba a José María Aznar en una llamada telefónica tras la detención de Pedro María Olano.

El precio que le sigue

Durante su intervención en el coloquio, el expresidente del Gobierno ha advertido de que "tras la salida masiva de etarras" y "el blanqueamiento de Sortu y de Bildu", el "precio siguiente" a pagar por el actual jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, para continuar gobernando será una consulta sobre la independencia tanto en el País Vasco como en Cataluña. "Hemos visto el pago de un precio a ese apoyo, por eso se elimina el delito de malversación, por eso se acepta el golpe de Estado, y hemos visto otro precio, el blanqueamiento de Sortu, de Bildu, y la entrega masiva de etarras y la salida masiva de etarras. ¿Cuál es el precio siguiente si ganase? consultas. Si la coalición de gobierno continúa, el precio para que Sánchez siga en el gobierno es una consulta en Cataluña y en el País Vasco". Así, Aznar sostiene que "la única manera de evitar eso es un Gobierno fuerte del PP", ya que "si prevalece" el Gobierno de Sánchez "quiere decir que se va hacia un proceso de cambio constitucional".