Petición de información

Cerco del PP al aumento en gasto en Defensa sin pasar por el Congreso

Los populares piden datos e informes sobre la última transferencia de 2.000 millones de euros

Tellado reta a Sánchez a demostrar que quiere un pacto de Estado antiaranceles tras no ver receptividad con sus medidas
Miguel TelladoEuropa Press

El Gobierno aprobó a principios de abril una transferencia de crédito por valor de 2.084 millones de euros para Defensa con el objetivo de atender compromisos «ineludibles». No obstante, ante la sospecha de que esa maniobra pueda ser una «trampa» de Moncloa en su objetivo por cumplir con las exigencias de la OTAN de alcanzar el 2% del PIB en gasto militar sin pasar por el Congreso ni aprobar los presupuestos, el PP ha registrado una solicitud de información que incluye la petición de datos y del expediente administrativo.

El Gobierno aduce que es una transferencia de crédito de carácter técnico, «similar» a la que ya hizo el Gobierno el año pasado y, por ello, este nuevo aumento no permite a Moncloa engordar sus cifras de gasto en Defensa a ojos de la OTAN. No obstante, el PP quiere conocer la letra pequeña para evitar las «trampas» de un Gobierno que no tiene apoyos parlamentarios suficientes para pasar por el Congreso y aprobar aumentos de gastos en materia de Defensa. De hecho, casi todos sus socios de investidura se van a mirar con lupa cualquier suplemento de crédito que quiera aprobar Moncloa.

En este sentido, el Gobierno tiene dos vías para cumplir con la OTAN y llegar al 2%: a través de los presupuestos; o, tratando de computar determinadas partidas como gasto en Defensa. La vía presupuestaria es complicada por las limitaciones que tiene, ya que no cuenta con apoyos suficientes para aprobar unas nuevas cuentas y los movimientos de crédito también tienen limitaciones: de hecho, para crear suplementos (cuando no hay crédito adecuado o suficiente y no es ampliable el consignado), tiene que pasar sí o sí por el Congreso de los Diputados, tal y como recoge el artículo 55 de la Ley general presupuestaria. La segunda vía ya ha recibido el rechazo de la propia OTAN dado que el Gobierno ha tratado de meter el gasto para el control de las fronteras o la lucha contra el terrorismo.

Asimismo, ante estas complicaciones, el Ejecutivo también está implorando a Europa para tratar de encontrar algún mecanismo que libere a España de los ajustes fiscales que supondría aumentar el gasto en Defensa, una maniobra complicada para un Ejecutivo socialista que ha hecho bandera de la lucha contra los recortes del Partido Popular. En este sentido, el ministro de Economía Carlos Cuerpo ha planteado ya en Europa la posibilidad de crear un fondo europeo que financie a través de subvenciones y préstamos proyectos de Defensa.

Además, el Gobierno también plantea instrumentos europeos de deuda común y la flexibilización de las reglas de gasto para evitar que la Defensa compute en los límites de déficit. Por tanto, tal y como señalan fuentes parlamentarias, Sánchez no contaba en esta legislatura con este problema en Defensa que va a poner de relieve su debilidad parlamentaria, ya que no va a poder avanzar demasiado lejos sin el respaldo de las Cortes.

En todo caso, esta partida de 2.084 millones va destinada, según el Gobierno, a «varios programas presupuestarios que se encuentran en desarrollo en el Ministerio de Defensa, especialmente en su capítulo de inversiones, para dar cobertura a los compromisos asumidos en ejercicios anteriores». La transferencia presupuestaria se distribuye en tres bloques: Programas Especiales de Modernización (PEM), modernización de las Fuerzas Armadas y apoyo logístico (sostenimiento) y en otros programas de su presupuesto.

Con esta partida se pretenden abordar acciones de modernización, mejora y mantenimiento de los efectivos, infraestructuras e instalaciones y también refuerzo del apoyo logístico, introduciendo además nuevas tecnologías, como la tecnología dual, el refuerzo de la ciberseguridad o la inteligencia artificial.

Todo el bloque de la izquierda ya ha advertido de que no van a dar apoyo a ningún aumento del gasto en Defensa e insisten en que cualquier decisión sobre el gasto militar debe pasar por el Congreso para ser votado. Y Sánchez no ha dado muestras de querer negociar con el PP, aunque las cosas han cambiado con el decreto sobre los aranceles de Trump, ya que los populares también han buscado desmarcarse de Vox.