Desmontando la declaración de Junqueras

No es cierto que en España haya presos políticos, y votar no es delito; pero sí hacerlo desobedeciendo al Constitucional.

«Me considero un preso político»

En España no hay presos políticos. Si esto sucediera, todos sus compañeros de partido que estaban en el Tribunal Supremo o el propio Quim Torra también estarían incriminados y no es así. Junqueras no está en prisión por cuestiones de ideología sino por actuaciones que ahora los jueces tendrán que determinar si son o no delito.

«Votar no es un delito, impedirlo por la fuerza sí. Trabajar pacíficamente por la independencia no es un delito»

El delito no es hacer el referéndum sino hacerlo desobedeciendo explícitamente la resolución del Tribunal Constitucional que suspendía la ley del referéndum, y que le fue emitida a todas las autoridades que participaron en él. No es delito trabajar por la independencia de manera pacífica, ni querer la independencia tampoco. Sí, usar métodos prohibitivos por el ordenamiento jurídico.

Sobre el 20-S: «Se repartían claveles, cantaban el vilorai. Seguro que no es susceptible de ninguna interpretación tumultuaria»

Ocurriría en el lugar en el que él estuvo presente. La realidad que yo vi es totalmente diferente: Yo estaba en el extranjero, al volver cogí un taxi y de repente nos envolvió una horda que todo lo tiraba por todas partes, como vallas amarillas que llegaron a rozar el parabrisas del vehículo. El taxista estaba nerviosísimo porque pensaba que le iban a destrozar el coche. Nos costó mucho salir. Me enteré después del rodeo de la Consejería de Hacienda. Nos costó tres cuartos de hora salir. No era una revolución del siglo XIX pero sí una situación de violencia en la calle que imponía.

«La nuestra es una reivindicación ciudadana, pacífica, reiterada en el tiempo»

Ellos quieren argumentar que el cambio de situación política que pretenden lo están haciendo no al modo de una revolución sangrienta o de un golpe de Estado clásico. Es verdad cuando dicen que es continuada, porque lo fueron los plenos de la vergüenza o la ley de derecho de autodeterminación y de transitoriedad jurídica. También lo fue esa declaración de independencia que se votó. Hay toda una planificación de actuaciones dirigidas a esa subversión del orden constitucional.

«No se destinaron fondos públicos al 1-O»

El tribunal tendrá que ver de donde salen los fondos para la organización, para la compra de las urnas o para la impresión de papeletas. Si el referéndum no es legal no se pueden usar fondos públicos para llevarlo a cabo.

«Nada de lo que hemos hecho es delito»

Es su estrategia de defensa. Hay que tener en cuenta que en nuestro sistema jurídico toda persona tiene derecho al silencio, a no declararse culpable, e incluso a mentir al Tribunal. Es una estrategia de defensa que se supone que la acusación desvirtuará. Yo no soy juez y nadie más puede juzgarlo porque sería hacer un juicio paralelo.

«Es evidente que esto no se resuelve poniendo a la gente en la cárcel»

Sí, lo es, pero eso es una cuestión de tipo político. Aquí no juzgamos actividades políticas sino actuaciones que pueden llegar a ser delito.

«Hubo violencia claramente injustificada y que incumplía el mandato judicial» Ésta claro que hubo violencia policial, porque hubo una orden de desalojo, y cuando la gente se resiste es cuando la Policía usa otros mecanismos. Había un mandato.

«Siempre está vacía la silla de enfrente»

Ha habido conversaciones entre los independentistas y los gobiernos españoles. Pero esto no es lo que se está juzgando y no tiene que interferir en los hechos que se juzgan.

Catedrática emérita de Derecho Constitucional