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Gobierno de España

El PSOE, por la ruptura de los bloques

La número dos de Sánchez no suscribe la tesis de que Cs sea su «socio preferible» pero solo descarta a Vox. Podemos agradece que el PSOE «no oculte» que planea gobernar con Rivera

Sánchez, ayer en Cádiz, junto al número 5 del PSOE por esta provincia, el historiador Francisco Javier Ramírez (izquierda), y el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández / Efe
Sánchez, ayer en Cádiz, junto al número 5 del PSOE por esta provincia, el historiador Francisco Javier Ramírez (izquierda), y el delegado del Gobierno en Andalucía, Lucrecio Fernández / Efelarazon

La número dos de Sánchez no suscribe la tesis de que Cs sea su «socio preferible» pero solo descarta a Vox. Podemos agradece que el PSOE «no oculte» que planea gobernar con Rivera.

Albert Rivera dejó claro hace semanas que no pactará con Pedro Sánchez. Ciudadanos también descarta a los extremos, es decir, a Podemos y a Vox. Éstos últimos, comandados por Santiago Abascal, reniegan frontalmente de las izquierdas y desconfían de la «veleta naranja». Los de Pablo Iglesias aseguran que, si los números dan y se plantea un nuevo «pacto del abrazo», volverán a decir «no» a un Ejecutivo de Sánchez con Rivera. Y en mitad de toda esta maraña de vetos cruzados, el PSOE ha abierto en las últimas horas su abánico de posibles acuerdos a todas las formaciones de las futuras Cortes, con una única excepción: Vox. Este reposicionamiento de Ferraz –teniendo en cuenta las nulas opciones de que en España se dé una gran coalición entre socialistas y populares– devuelve al debate electoral la posibilidad de que se plantée tras el 28-A un acuerdo entre el PSOE y Ciudadanos. Lo avanzó este fin de semana el secretario de Organización socialista, José Luis Ábalos, en una entrevista: «Ciudadanos es preferible a los independentistas en una investidura de Sánchez».

Ayer, la «número dos» del PSOE, Adriana Lastra, tuvo que esquivar numerosas preguntas en torno a cuáles serán las preferencias de Sánchez a la hora de buscar acuerdos. No dio pistas, más allá de descartar a Vox –«no pactaremos ni vamos a llegar a ningún acuerdo con ellos», reconoció– pero su mensaje sí insistió en no dejar al margen a ninguna de las demás formaciones, por tanto, tampoco a Ciudadanos: «Si tenemos opciones de gobernar porque no sumen PP, Cs y Vox pondremos nuestro programa encima de la mesa y al escrutinio de los 350 diputados de la Cámara». Pese a no descartar de entrada un acuerdo con Rivera, Lastra cargó contra los «naranjas» por ponerle un cordón sanitario al PSOE y no a «una ultraderecha financiada por la Fundación Francisco Franco».

Las palabras de Ábalos, en las que señaló a Cs como un «socio preferible», fueron bienvenidas en Podemos, el partido que durante esta legislatura mayor apoyo ha dado a Sánchez. «Agradezco al ministro que diga la verdad y que deje claro que el PSOE piensa en gobernar con Ciudadanos, porque así la gente sabe lo que está votando ese domingo», aseguró ayer Pablo Echenique, secretario de Organización del partido morado. De hecho, una parte del discurso en el que Podemos insistirá durante la campaña descansa en la advertencia al electorado de izquierdas de que, tras el 28-A, son dos las opciones de Gobierno que defenderán «los poderosos»: un acuerdo a la andaluza entre PP, Cs y Vox o, si no dan los números para que se dé este escenario, un pacto entre PSOE y Ciudadanos.

Esta última vía –la del Ejecutivo Sánchez-Rivera– supondría la reedición del acuerdo del abrazo que alcanzaron en febrero de 2016 los líderes del PSOE y Ciudadanos para investir al actual presidente del Gobierno. Fracasó entonces porque la dirección de Podemos rechazó apoyar este pacto, decisión que fue ratificada por las bases moradas de forma abrumadora. Ahora, con las encuestas dibujando una fuerte fragmentación entre las izquierdas y las derechas, la opción de un acuerdo entre PSOE y Cs es la única que trasciende la rigidez de los bloques.

Según la encuesta de NC Report que publicó este lunes LA RAZÓN, la coalición entre socialistas y naranjas es la que contaría, dentro de los posibles pactos entre dos formaciones, con un mayor número de diputados: entre 163 y 172 escaños. Por debajo se situaríae el bipartito entre PP y Ciudadanos, que, según el sondeo, sumarían entre 148 y 154 diputados. Como tercera coalición bipartita con más fuerza parlamentaria se situaría la coalición entre el PSOE y Podemos: llegarían a contar con entre 133 y 140 diputados; una cifra que con Compromís y En Marea, lograría como techo 148. Ninguna opción con dos partidos llegaría por tanto a la mayoría absoluta. Sí lo haría, en el caso de que se celebrasen elecciones hoy, un acuerdo entre PP, Cs y Vox (entre 172 y 180 diputados) y se quedaría cerca la suma de PSOE, Podemos y soberanistas (165-175).