Sevilla

Juan Antonio Roca, un «salvador» de presos que sufren más que él

El presunto cerebro de la mayor trama de corrupción conocida en España, Juan Antonio Roca, que el próximo 29 de marzo cumple ocho años en prisión, se ofrece como "salvador"de reclusos que sufren más que él, según un psicólogo del Centro Penitenciario de Alhaurín de la Torre (Málaga).

El que fuera "jefe"de todos los asuntos urbanísticos de Marbella intenta no pensar demasiado en su situación personal y, por ello, prefiere escuchar y ayudar a los que le rodean para no derrumbarse pensando que lleva años acariciando la idea de pisar la calle con algún permiso.

Este técnico fue requerido por el juez de vigilancia penitenciaria para que realizara un informe psicológico ante la solicitud de Roca para gozar de algún permiso carcelario y, en el mismo se aseguró que no sólo tenía un comportamiento normalizado sino que también tenía una actitud favorable al cumplimiento de las nuevas condenas.

Además, en el escrito del psicólogo se añade que Roca incluso tenía "un empeño en ofrecerse como salvador de personas cuyo sufrimiento sobrepasaba el propio", según han indicado a Efe fuentes del caso.

Esta actitud puede ser de autodefensa a las posibles secuelas físicas y psíquicas que puede padecer por los años en prisión recluido, han señalado las fuentes.

Siempre ha sido considerado un hombre con una personalidad fuerte, con una conducta colectiva de líder y un cabeza de familia necesario para todos sus allegados que no han dejado de visitarlo debido a que "cuenta con apoyo familiar", según la trabajadora social, también consultada para el informe.

Nunca habla de sus miedos, prefiere refugiarse en su actividad laboral diaria de limpieza, estudio y ayuda a los demás.

"Acata con respeto y trata de comprender la resolución por la que se le denegó el último permiso", "es participativo y voluntarioso"y mantiene "una convivencia adecuada", según el educador, que también fue consultado para elaborar el informe.

Debido a todo ello, el 11 de noviembre de 2013 tras una reunión del equipo técnico "por unanimidad"se decidió proponer a la Junta de Tratamiento un permiso de tres días y la Junta acordó por mayoría su concesión, aunque el director no acudió y pidió su revocación.

Cuando ya se acercaba la Navidad, Roca pensó en ese momento que quizás podría pasar tres días con su familia, pero no sólo no se le concedió sino que además se le trasladó a la prisión de Sevilla II, por lo que tenía que pasar por una nueva Junta de Tratamiento y necesita al menos otros tres meses de periodo de observación por parte de los técnicos para elaborar otro informe.

Causalidad o no, son muchas las voces en el ámbito judicial que consideran que no es normal lo que está ocurriendo con las posibles libertades a Juan Antonio Roca, quien siempre ha tenido un comportamiento "ejemplar"y está carente de sanciones.

En este aspecto, diversas fuentes jurídicas consultadas por Efe no comprenden su traslado a Sevilla y anteriormente a Granada, cuando las políticas penitencias están de acuerdo con el acercamiento, incluso de los etarras.

En el caso de Roca no solo no se le deja en la prisión de Málaga, donde se le juzga, tiene familia y también se producen todas las reuniones con el administrador judicial por todos los procedimientos judiciales, sino que tampoco se le asigna Algeciras, que está a menos kilómetros de los juzgados.

En tan sólo dos años se le tuvo que trasladar en más de treinta ocasiones a los juzgados de Marbella y Málaga y durante el juicio de Malaya, que necesitó de 199 sesiones, tampoco se le concedió el cambio de centro de cumplimiento.

En este sentido, el propio presidente del Tribunal, José Godino, "consideró desaconsejable"el traslado fuera de Málaga dado que no sólo tenía que asistir al juicio, sino que con posterioridad a la finalización del mismo tenía que seguir asistiendo a los juzgados de Málaga". Pese a todo continúa asignado a Sevilla.