El personaje

Ramón Tamames: La veteranía y la patochada

Abascal quiere su minuto de gloria tras los malos resultados en Andalucía y el marrón de Macarena Olona, que le da dolor de cabeza

Ramón Tamames
Ramón TamamesPlatónLa Razón

Cuando le preguntas a Ramón Tamames por qué a estas alturas de su vida se ha metido en este jardín su respuesta es clara: «Nunca ha habido una moción de censura presentada por un independiente, además la veteranía es un grado». Así reflexiona el venerable profesor, el gran catedrático e intelectual sobre su anunciada candidatura parlamentaria, en la que piensa puede dar una visión de España más académica que política. Es evidente que la iniciativa satisface a Pedro Sánchez, que intentará retrasarla lo más posible hasta las elecciones de mayo para soplar el viento a su favor y, como dice el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, demostrar ante la opinión pública que hay dos maneras de gobernar España. El líder de Vox, Santiago Abascal, quiere su minuto de gloria tras los malos resultados en Andalucía y el marrón de Macarena Olona que la da dolor de cabeza. Sin olvidar su pertinaz batallita contra el PP y el deseo de aislar a Alberto Núñez Feijóo. Para el resto de los partidos de la izquierda radical y los separatistas, el asunto puede derivar en teatro y convertir en un circo el hemiciclo del Congreso. Al final, una moción de censura fallida y un claro ganador, el presidente del gobierno, Pedro Sánchez.

Hace meses que el asunto comenzó a muñirse en casa de Ramón Tamames por su amigo el escritor Fernando Sánchez-Dragó, verdadero enlace con Santiago Abascal y su gran asesor en la sombra, Kiko Méndez Monasterio. La estrategia de elegir a un personaje de inequívoca trayectoria antifranquista, militante del antiguo Partido Comunista de España, era una jugosa baza que daría titulares. Algo muy necesario en estas horas bajas para Vox, mientras se persigue colocar a Núñez Feijóo, que no es diputado, en un papel de convidado de piedra. Al principio, el ilustre economista prometió pensarlo y hasta invitó a cenar en su domicilio al propio líder del PP, quien con su sorna gallega le dijo: «Ramón, si tú fueras mi padre no te lo aconsejaría». Durante varias semanas el veterano profesor sopesó los pros y contras, hasta finalmente aceptar. Él insiste en su vitola de independiente, incuestionable demócrata y dilatada experiencia política y académica, lo que en su opinión puede dar un cierto lustre a un Congreso repleto de mediocres, radicales y separatistas, que no le llegan a Tamames ni a la base de su muleta. El hecho de su edad, lindando con los noventa años, es para él un acicate que refleja el valor de la experiencia.

Si todo sucede según lo previsto, el discurso político lo hará el líder de Vox, Santiago Abascal, mientras que el candidato será una especie de compañero «senior». O sea, como en una de sus múltiples clases, el viejo profesor da paso al alumno y luego remata con su autoridad docente. Conociendo la habilidad de Pedro Sánchez, parece claro que no confrontará duramente con Tamames y dirigirá sus dardos envenenados contra Abascal y el PP. De ahí que Alberto Núñez Feijóo insista en el «show» parlamentario que se avecina y la inutilidad de la moción. El líder del PP piensa que ello dará alas a un Gobierno dividido, bajo una coalición con Unidas Podemos que hace aguas por la últimas normativas del «solo sí es sí», la ley trans o la guerra de Ucrania.

Los populares se inclinan por la abstención en el debate de una moción que será la sexta desde la instauración de la democracia. Todas ellas fallidas, excepto la cuarta, la que permitió a Pedro Sánchez desalojar a Mariano Rajoy de La Moncloa con el unánime apoyo de toda la izquierda y los nacionalistas, algo que salvo sorpresas puede ahora suceder de nuevo.

Ramón Tamames es uno de los economistas, intelectuales y catedráticos más acreditados de nuestro país. Hijo del prestigioso doctor en Medicina, Cirugía y Profesor de Anatomía, Manuel Tamames, posee un currículum brillante que le llevó a estudiar en el Liceo Francés, Facultades de Derecho, Ciencias Económicas y la London School of Economics. Técnico Comercial del Estado, Catedrático de Estructura Económica, sus innumerables obras son el tratado imprescindible de cualquier experto en la materia.

Escritor y colaborador incansable, le recuerdo de compañero en las tertulias del ya fallecido Antonio Herrero, en la Cadena Cope. Un día le pregunté por qué había dejado la militancia en el PCE y me dijo que, con el tiempo, había descubierto algo: «El capitalismo es como un gato de siete vidas que lo aguanta todo».

Demócrata convencido de izquierdas, nunca abrazó el marxismo-leninismo y derivó a posiciones más moderadas. Fue primer teniente de Alcalde en el Ayuntamiento de Madrid con otro viejo profesor, Enrique Tierno-Galván.

En 1981 abandonó el PCE, fundó la Federación Progresista, germen de Izquierda Unida, y fue elegido diputado en el Congreso, escaño que dejaría sin acabar la legislatura para ingresar en el CDS de Adolfo Suárez. Poco después dejó la política y se entregó a su tarea como profesor, intelectual y escritor.

Miembro de número de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas, patrono de varias Fundaciones, poseedor de los premios más prestigiosos de Ensayo y Economía, casado con Carmen Prieto-Castro, padre de tres hijos, Alicia, Laura y Moncho, su casa madrileña siempre ha sido un foro abierto al debate y las discusiones de altura con personas de diferentes ideologías.

Ahora, algunos le reprochan haber caído en esta «patochada» orquestada por Vox y Santiago Abascal, aunque él opina que nada tiene que perder y, de no hacerlo, se habría arrepentido. Si todo discurre según lo previsto, Abascal tendrá sus anhelados titulares, pero perderá la moción de censura. Ramón Tamames nos dará una lección magistral sobre la actual situación de España y Pedro Sánchez seguirá en el poder, aunque tal vez con un poco más de gloria.