Congreso

Ramón Tamames y Vox alcanzan un acuerdo para presentar la moción de censura

El economista ya indicó que "haría todo lo posible" para señalar al Gobierno ante la opinión pública

Volar mejor por Ramón TAMAMES
Volar mejor por Ramón TAMAMESlarazon

Vox ya tiene candidato para la moción de censura que prometió. Después de cuatro reuniones “atando flecos” la formación que lidera Santiago Abascal ha conseguido que el economista Ramón Tamames acepte liderarla. El eurodiputado Jorge Buxadé ya indicó el pasado lunes que estábamos “más cerca” de que se materializara después de que el propio líder de Vox, custodiado por todo su grupo parlamentario, prometiera en el Congreso que “haría todo lo posible y lo que esté en mi mano para señalar al Gobierno ante la opinión pública” algo que hizo después de que se aprobara la rebaja de la sedición, la malversación o la Ley del "solo sí es sí".

La moción de censura contra el Gobierno de Pedro Sánchez será anunciada por Vox oficialmente este miércoles. Ha sido el propio ex diputado del PCE quien este martes durante la sesión de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas lo ha confirmado.

El nombre de Ramón Tamames ha vuelto a la primera línea de la política este febrero. A principios de mes se confirmó que Vox había pensado en él para encabezar la ofensiva parlamentaria contra Pedro Sánchez, y que “estaba disponible para hacer un dictamen de cómo está el país”.

El propio Tamames explicó a LA RAZÓN que la propuesta inicial se la formuló inicialmente su amigo Fernando Sánchez Dragó, que es muy cercano a Vox y a Santiago Abascal. El economista ve con buenos ojos la propuesta de Vox debido a la situación que atraviesa el país, desde el ámbito económico (donde pone en duda los datos de crecimiento económico que ha dado recientemente el Gobierno, de un 5,5%, ya que considera que hay errores de cálculo) al ámbito político (con las cesiones a los independentistas vascos y catalanes con la sedición y la malversación, introduciendo el «virus del separatismo en Navarra» o la «apropiación» que está haciendo el Gobierno del poder legislativo y judicial).

El PP no ve con buenos ojos esta moción de censura porque consideran es un error estratégico" porque las «cuentas no salen» y, por lo tanto, solo ayudaría a «reforzar» a Pedro Sánchez. Dicho esto, aseguró que el partido «se mantiene en la misma línea". Feijóo ya dijo en su momento que lo respetaba y que, si Tamames fuera su padre, confesó que "no le dejaría". La postura de los populares no se ha movido y estará, por tanto, en la abstención.

El líder de Vox, Santiago Abascal, inició las reuniones con el exmilitante del PCE por la necesidad de que las Cortes hagan una «profunda reflexión» sobre la situación que España. Más tarde, Abascal pidió «un poco de paciencia» respecto a las conversaciones con el político y confirmó que «hay mucho interés» entre ambos para presentar una moción de censura. «Seguimos trabajando para llegar a un acuerdo que permita presentar una moción de censura histórica», apuntó entonces.

Tamames reconoció que estaba dispuesto a encabezar la moción contra el presidente del Gobierno, aunque reconoció que la decisión no estaba aún tomada porque quedaban detalles por cerrar con Vox. Mientras tanto, desde el partido insistían en que el economista, de 89 años, sería un buen candidato para su moción de censura, pero han remarcado que no es la única opción con la que trabajó la formación de Abascal.

Respecto a su trayectoria política, Ramón Tamames militó en el Partido Comunista (PCE) durante la dictadura y fue concejal y primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Madrid en la alcaldía de Enrique Tierno Galván. Más tarde se afilió al Centro Democrático y Social (CDS).

Abascal anunció en diciembre la voluntad de Vox de presentar una nueva moción de censura, aunque dijo que su deseo era que el candidato fuera una persona independiente, con experiencia de gobierno y que se comprometa a la convocatoria inmediata de elecciones generales. Además, quería contar con el apoyo de otros grupos parlamentarios para no registrar la moción únicamente con la firma de los 52 diputados de Vox, aunque el PP rechazó la oferta desde el principio.

En el mes de enero, el líder de Vox explicó que su objetivo era «retratar» al jefe del Ejecutivo «junto a sus socios golpistas», pero reconoció su temor a que el resultado pudiera ser que se acabe «retratando de nuevo al PP junto al PSOE repartiéndose el CGPJ y el Tribunal Constitucional».