Iñaki Zaragüeta

Se requiere firmeza

La extremada crisis económica, el aumento galopante del desempleo, el desbarajuste de la ordenación territorial del Estado, el desprestigio del Tribunal Constitucional, las concesiones y favores dispensados al Gobierno de Gibraltar... ¿Nos repondremos algún día de los perjuicios que proporcionaron a España los mandatos de Zapatero? Era la pregunta que me hacía ayer mi amigo Rogelio al conocer los dos planes del llanito Picardo de instalar un cable telefónico submarino para dar total autonomía «on line» a las empresas, muchas de ellas de dudosa legalidad en su actividad allende La Verja, y de construir un espigón para contención de los temporales que azotan la cara oriental del Peñón. Continúan con la política de hechos consumados que tan buenos frutos les ha dado, como se ha demostrado con la implantación del aeropuerto, la ampliación del puerto marítimo y, hace pocos días, con el lanzamiento de 70 bloques de hormigón al fondo del mar para destrozar los caladeros donde faenan los pesqueros gaditanos.

El Gobierno de Rajoy ha reaccionado como requiere el momento, con firmeza. Debería sentir el apoyo total de nuestra sociedad. Lo lamentable es la impresión de estar sólo en la defensa de los intereses de España, una nación que casi ha conseguido identificar a quienes la defienden con la derecha radical. Tampoco podemos extrañarnos tras los errores en el desarrollo de las autonomías o con la presencia de presidentes como el que afirmó «nación es un concepto discutido y discutible». ¡Cuánto daño hicieron sus ocho años!.

El PSOE deberá aclararse en su responsabilidad estatal yendo de la mano con el PP en las Relaciones Exteriores porque entre los dos agrupan a la inmensa mayoría. Así es la vida.