Casa Real

Bienvenida, Mrs. Obama

La Primera Dama de EE UU llegó ayer a España para terminar su gira «Let girls learn», para impulsar la educación de las niñas. Hoy, ella y Doña Letizia hablarán ante 500 estudiantes.

Bienvenida, Mrs. Obama
Bienvenida, Mrs. Obamalarazon

La Primera Dama de EE UU llegó ayer a España para terminar su gira «Let girls learn», para impulsar la educación de las niñas. Hoy, ella y Doña Letizia hablarán ante 500 estudiantes.

Su Excelencia la Primera Dama de los Estados Unidos de América, Michelle Obama, ya está en España. A las 18:30 horas de ayer, el avión oficial estadounidense –no el Air Force One– tomó tierra en el aeropuerto de Torrejón de Ardoz, del que descendió acompañada por su madre, Marian Robinson, y sus hijas, Malia y Sasha. La Primera Dama estadounidense ha hecho un parón en nuestra ciudad tras estar en Liberia y en Marruecos, desde donde viajó, para terminar la gira de promoción de su asociación «Let Girls Learn» –Dejemos que las niñas aprendan–, en apoyo a las adolescentes que por falta de medios no pueden acceder a una educación digna. Las actrices Meryl Streep y Freida Pinto no acompañaron a «Mrs. Obama» hasta el final de su gira, a la que se unieron en Marraquech para denunciar las políticas de educación discriminatoria contra la mujer. A pie de pista les recibió el embajador de Estados Unidos en España, y su pareja, el interiorista Michael Smith, además de Fidel Sendagorta, director general para América de Estados Unidos, y el introductor de embajadores, Juan Sunyé Mendía –Los Reyes se encontraban en Pamplona cumpliendo con la agenda oficial–. El recibimiento más especial fue el de la niña Marta Carreño, adolescente con discpacidad intelectual y alumna del colegio Carmen Pardo-Valcarce. La niña le entregó un ramo de flores,obsequio que aportó una carga emotiva al ser de la «Huerta de Montecarmelo».

Pero el viento no perdona a nadie, ni siquiera a la Primera Dama de Estados Unidos, y ayer tuvieron dificultades a la hora de descender por las escaleras del avión, especialmente Malia, quien llevaba el vestido más ligero, y tuvo que caminar sin soltar la parte de abajo de su vestido hasta el coche. Las hijas del presidente de Estados Unidos no se subieron al mismo coche que su madre y abuela, sino que se fueron con el embajador –y una razón de peso podría ser una decisión rápida para alejar a la niña de los imparables «flashes», ya que Michelle Obama y su madre se subieron, lógicamente, en el vehículo más cercano al avión. La llegada de Michelle Obama fue un «visto y no visto», ya que no saludó a los periodistas con la mano, sino que rápidametne desapareció tras los cristales tintados del vehículo oficial –algunos coches se han traído directamente de Estados Unidos, a tenor de sus matrículas–. Hoy por la mañana tendrá lugar en una de las naves del antiguo Matadero de Madrid un acto en una de las naves, que reunirá la asistencia de 500 chicas escolares y universitarias. Michelle Obama contará sus experiencias vividas a lo largo de sus viajes, y después Doña Letizia también tomará la palabra. La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, también asistirá, quien ayer anunció que le regalará a la mujer del presidente de los Estados Unidos un collar «muy bonito» con el «skyline» de Madrid. La Reina invitará después a la Primera Dama a tomar un té en el Palacio de la Zarzuela, al igual que hizo la invitada cuando fue anfitriona el pasado mes de septiembre debido a la visita de los Reyes a Washington, y además le enseñó su huerto ecológico. La Casa del Rey dará fe del encuentro a través de la difusión posterior de las imágenes, ya que no se ha acreditado a los medios de comunicación.

El presidente de EE UU, Barack Obama, visitará nuestro país la semana que viene, pero desde la embajada se informa de que la decisión de venir por separado responde a la consideración de que por separado la actividad de la Primera Dama tendrá mayor relevancia. No es la primera vez que Michelle Obama visita nuestro país ni coincide con Doña Letizia, ya que, en 2010, siendo aún Princesa de Asturias, la recibió, junto con los entonces Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía, en Marivent al término de sus vacaciones en España, acompañada por Sasha, quien trajo unos peluches para que Doña Letizia regalara en su nombre a sus hijas Leonor y a Sofía.