Cuidarse

Una microbiota en plena forma previene el contagio de COVID-19

El 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino.

El 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino.
El 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino.Pixabay

Ya llevamos un año con el coronavirus en el planeta. Tenemos ya hasta varias vacunas y próximamente saldrán nuevos medicamentos que anularán el virus. Pero, ¿qué hay de la prevención? Como todo en salud, esto es vital y, curiosamente, este virus ataca casi siempre a sistemas inmunes debilitados por lo que también está en nuestra mano debilitarlo cuidando nuestro intestino. Vicenta Llorca, una de las máximas especialistas en medicina estética y nutrición antiaging, nos habla de cómo cuidarnos.

-Últimamente se habla mucho de la importancia de mantener a raya la macrobiota pero ¿qué es exactamente esto?

-La “macrobiota” es nuestra aliada y amiga, hay que cuidarla como oro en paño. Antes se le llamaba “flora intestinal”. Es el conjunto de microorganismos (virus, bacterias, parásitos que conviven con nosotros de forma habitual). Es algo absolutamente personal e intransferible porque cada uno de nosotros tenemos nuestra propia macrobiota, que es diferente a la de otra persona, y esto depende directamente de nuestros hábitos de vida y tipo de alimentación.

Es fundamental para tener un sistema inmunitario fuerte y esto es lo que la macrobiota hace por nosotros, además de hacernos sentir mejor. Está formada por 100 billones de microorganismos que debemos mantener en un equilibrio saludable

-¿Qué tipo de cuidados debemos tener para que nuestro intestino sea saludable?

Nuestra macrobiota va a depender de forma directa de los alimentos que comemos, los microorganismos que la forman comen lo mismo que nosotros, por tanto es nuestra responsabilidad comer de forma saludable para tener una macrobiota saludable, y así tener defensas ante las infecciones. Hay que consumir prebióticos y probióticos, evitar tóxicos como alcohol, especialmente destilado, tabaco, cafeína, picantes, alimentos procesados, consumos excesivos de proteínas como carne, promueve las bacterias relacionadas con la putrefacción, produciendo un desequilibrio en la macrobiota.

Es conveniente comer alimentos lo más saludable posibles, de cultivo ecológico a ser posible, frescos, hidratarse adecuadamente, al menos un litro y medio de agua al día.

Y, sin duda, dieta variada, así nuestra flora intestinal será más rica y podrá defendernos mejor, “comer podo de todo y mucho de nada”. Indudablemente gestionar el estrés y dormir adecuadamente son factores que ayudan a mantenerla saludable.

-¿Por qué se le llama el segundo cerebro? ¿En qué medida nos afecta?

-Tenemos más de 200 millones de neuronas en nuestro intestino que se comunican de forma directa con el sistema nervioso central. El 95% de la serotonina se produce en el intestino, es un neurotransmisor que interviene de forma directa en nuestro humor, nos hace sentir bien, seremos felices. Así como muchas más sustancias que intervienen de forma directa en nuestra salud y bienestar. Es un “cerebro independiente”, autónomo.

El 70% de nuestro sistema inmune está en el intestino. Además de las explicaciones neuroendocrinas que podamos desarrollar creo que todo el mundo entiende lo de “sentir mariposas en el estómago” cuando nos sentimos enamorados.

-¿Cree que un sistema inmune fuerte previene en cierto modo la infección por COVID-19?

La respuesta es un SÍ con mayúsculas. En estos tiempos el virus Covid-19 es el protagonista de nuestras vidas, nuestras relaciones, pero sólo es un virus, y se comporta como todos los virus, así que esperemos que pronto ya no sea un virus de actualidad. Si nuestras defensas están fuertes y alertas, la probabilidad de contagiarse por Covid-19 o cualquier otro tipo de enfermedad es mucho menor, no podemos hablar del 100%, porque en medicina no existe el porcentaje absoluto, pero sí podemos afirmar que tenemos muchas menos papeletas para contagiarnos

-¿Existen algunos alimentos que debemos comer con asiduidad y otros que no debemos abusar? O, por el contrario, hay que comer de todo?

Alimentos que no deben faltar para conseguir tener una excelente macrobiota son los alimentos probióticos ( “a favor de la vida”), fermentados contienen bífidus, lactófilos y favorecen la producción de ácido láctico como el kéfir, los yogures, col fermentada o kimchi, levadura madre en el pan, cerveza, salsa de soja fermentada, germinados o “brotes” (deben consumirse frescos). Otro grupo de alimentos son los alimentos prebióticos (no digeribles, promueven el crecimiento de las “bacterias buenas” o simbióticas, por ejemplo los que contienen pectina (fibra soluble) como la manzana, el ajo y la cebolla que contienen inulina (fibra soluble) .