La mejor tortilla de patatas de España se come en Galicia y no tiene cebolla

Hay platos que despiertan pasiones y hay tortillas que rozan el éxtasis. En pleno A Coruña, junto a la bulliciosa Plaza de Lugo, existe un lugar que sirve, según muchos devotos y algún premio, la que es la mejor tortilla de patatas que uno puede llevarse a la boca en España.

Su nombre es O Cabo, un restaurante sencillo, luminoso y siempre lleno, donde los pinchos vuelan y los comensales hacen cola con la esperanza de saborear una receta que, en apenas cuatro ingredientes, logra rozar la perfección: patatas, huevos, aceite y sal.

Pero no cualquier patata, ni cualquier huevo. La base es la kennebec gallega, cortada en rodajas finas y frita hasta quedar rubia, dorada y tierna. Los huevos, camperos, se baten sin llegar a espumar y se mezclan con las patatas directamente desde la sartén, todavía calientes, para que se empapen y se fundan en una mezcla untuosa.

El conjunto se remata con arte en el fuego: sartén muy caliente al principio, luego vueltas rápidas, fuego suave y movimientos circulares, para lograr una textura jugosa, cremosa, homogénea. Y, en coherencia con la ortodoxia coruñesa, sin cebolla. Una tortilla que gusta a todos, como la de toda la vida pero, quizás, con un punto más de jugosidad; suficiente, incluso, para poder degustarla con pajita, como ha hecho, en tono humorístico, el famoso influencer gastronómico madrileño, Pablo Cabezali, durante su último viaje a Galicia.

Detrás de esta obra de arte gastronómica están Ramón Rodríguez e Isabel Gesto, pareja dentro y fuera de los fogones, que lleva más de una década años perfeccionando una receta que no necesita ornamentos ni reinterpretaciones.

En septiembre del año pasado su tortilla fue reconocida como la mejor de España en el XVII Campeonato Nacional, celebrado en Alicante Gastronómica. Ya el año anterior habían sido subcampeones, y en 2024 también se alzaron con el título de campeones de Galicia, aunque ni ese palmarés ha alterado su manera de hacer.

En O Cabo todo tiene un aire auténtico, a cocina de toda la vida. No hay trucos ni secretos de la modernidad: sólo buena técnica, mejor producto y la confianza propia del valor de lo sencillo.

La favorita de Feijóo

Quien quiera probarla, eso sí, debe ajustarse a los ritmos del local. Si uno va sobre las 10.30 o a las 19.00 puede recibir una tapa generosa con su copa de vino, pero la tortilla ‘seria’ solo se sirve a mediodía y en la cena.

En esos turnos, el restaurante puede superar las 100 raciones al día. La versión de campeonato, la más cuidada y purista, la prepara Ramón en persona y no se encuentra a diario en carta. Y entre quienes no se la pierden cuando pisan A Coruña -ahora con menos frecuencia que antes-, se encuentra el expresidente de la Xunta y líder del PP, Alberto Núñez Feijóo.

En un país donde la tortilla de patatas levanta debates nacionales, O Cabo ha logrado el más difícil todavía: convencer a puristas y neonatos, a vecinos y forasteros, con una receta de las de toda la vida llevada a su máxima expresión.

A estas alturas, no importa tanto que haya sido galardonada como que siga provocando lo mismo que hace una década: esa sonrisa cómplice al primer bocado, ese ‘qué rica está’ que se escapa sin pensarlo. A fin de cuentas, cuando una tortilla es perfecta, no necesita más que eso.