Incendios
La Xunta se centra en la protección de los ríos para frenar el impacto de las cenizas de los incendios
Rueda resaltó que el Gobierno autonómico lleva semanas “trabajando para prevenir las posibles consecuencias de los fuegos” en los ríos
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, anunció ayer tras la reunión semanal del Consello da Xunta que el Gobierno gallego ha completado ya las primeras actuaciones para evitar que las cenizas provocadas por los incendios forestales lleguen a los ríos de la Demarcación Hidrográfica de Galicia-Costa.
Según la Xunta, el principal objetivo es reducir al mínimo las consecuencias de los fuegos sobre el entorno fluvial y garantizar la seguridad de una cuenca en la que viven más de dos millones de personas.
En las últimas semanas, Augas de Galicia ha desplegado distintos trabajos de protección en municipios como Ponteceso y Lousame, y actualmente desarrolla intervenciones en Meaño. Además, están previstas nuevas actuaciones en los ayuntamientos pontevedreses de Agolada y Vilaboa.
Entre las medidas aplicadas destacan los cordones vegetales con ramas y troncos para crear entramados de biomasa que frenen la erosión, así como barreras de madera en tramos con pendiente para reducir la velocidad del agua y retener posibles arrastres.
Rueda destacó que estas labores tienen un carácter prioritario tras los incendios y se suman al trabajo de conservación que Augas de Galicia realiza durante todo el año. En 2024, el organismo contó con 2,7 millones de euros destinados al mantenimiento fluvial, con tareas que incluyen la retirada de biomasa muerta y podas de vegetación para mantener los cauces en buen estado.
Galicia cuenta con cuatro demarcaciones hidrográficas, pero la de Galicia-Costa (que incluye 182 municipios y más de la mitad de la población gallega) es la única de competencia autonómica.
Por este motivo, la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático prevé reunirse con la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para compartir experiencias y coordinar actuaciones conjuntas en los territorios más castigados por la ola de incendios que ha sufrido Galicia durante este verano.