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Gastronomía
Destinos con sabor: Pintarroja, el chiringuito de puerto del ex elBulli Eugeni de Diego en Menorca
El chef, gran conocedor de la isla, destaca Sa Llagosta, el Café Balear y En Caragol como lugares a los que ir si visitamos la isla
Cuenta que con la apertura de Pintarroja en Menorca ha visto hecho realidad su sueño de verano. Después de muchos años compartiendo fogones con Ferran Adrià en elBulli y de contribuir a poner en marcha elBulliLab, lo dejó para idear el exitoso concepto que es A Pluma, con varias sedes y ahora propiedad de un fondo de inversión. A día de hoy, se centra en Bar Lombo y Colmado Wilmot, en Barcelona, en la Jamoteca, en Shanghái y, durante estos meses, en la segunda temporada de este chiringuito en uno de sus destinos favoritos. Pero, insiste, no quería abrir uno cualquiera, qué va, sino crear un auténtico lugar de culto al marisco. En definitiva, se trata de una «inspirada en los veranos de Menorca y en sus pescadores, pero rompiendo con los códigos de marisquería anticuada con un producto de máxima calidad».
Cocina sin florituras
Nos explica que es un chiringuito de puerto en el que degustar un producto fresco, recién sacado del mar, cocinado de manera honesta, sin florituras, hecho a la plancha o al vapor. Por este motivo, Eugeni trabaja con los pescadores locales, pero también colabora con cooperativas y productores de la zona que le permiten encontrar otras materias primas autóctonas de máxima calidad, de temporada y, sobre todo, con alma menorquina para preservar y resaltar la esencia de la isla en cada bocado. De ahí que imbatibles sean los mejillones con sobrasada, la ensalada de tomate con queso de Mahón, el bikini de sobrasada, su versión de la ensaimada, la langosta con patatas y la emblemática pomada. Elaboraciones a degustar en uno de sus rincones favoritos de la isla, en el puerto de Es Castell, que, según dicen, es el primer punto de Menorca desde donde se ve salir el sol.
Durante nuestra conversación, y como buen conocedor de la isla, coloca en el mapa gastronómico otras mesas. En el mismo pueblo, Can Los es un espacio que, en un principio, no llama la atención hasta que te enteras de que es punto de reunión de los paladares locales de buen comer. La caldereta de Josep ya es motivo para reservar siempre abriendo boca con una de ortiguillas fritas. Es tan imprescindible como Sa Llagosta, en Fornells, con David de Coca al frente, autor de numerosas recetas en las que la langosta es protagonista, aunque en tempura es la elaboración que Eugeni mantiene en el recuerdo. Y del norte de la isla al Café Balear, en Ciudadela, restaurante de referencia al que vamos a comer la caldereta de langosta o en arroz caldoso, además de los pescados al peso (gallo San Pedro, cabracho, dentón, mollera…), ya que cuenta con la Rosa Santa Primera, la embarcación del grupo, propietario de Pizzería Roma y Pins46, que sale a faenar a diario para capturar el pescado y el marisco que se degustan en los tres locales.
Y qué de decir de En Caragol, un destino «brutal», promete, en San Luis, donde lo suyo es rendirse ante un arroz de carabineros frente al mar: «Los hacen secos, muy finos y con pocas cosas, que es como me gustan», reconoce antes de recordarnos que no nos podemos ir de la isla sin comprar los clásicos pastissets, que tanto le gustan, en la centenaria pastelería Cas Sucrer (Es Mercadal).
►Dónde:
Moll d’en Pons, 10. Es Castell. Menorca.
►Precio medio: 45 euros.
► 608 762 427.
pintarrojamenorca.com
@pintarrojamenorca
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