“Alucino. Da vergüenza ajena”, ha dicho Diego en la hoguera de confrontación nada más ver las imágenes de Lola haciendo “cosas” con el tentador Carlos bajo las sábanas. Pero a medida que Sandra Barneda pronunciaba eso de “hay más imágenes”, la tensión entre la pareja crecía y parecía que nada podía salvar su amor, ni siquiera unas imágenes sobre “su campeón”, el perro Horus. Pero el cántabro se mostró de lo más conciliador con una Lola que no paraba de llorar, arrepentida.

Tras debatir su situación, Lola eligió continuar en la villa “para demostrar su amor” y por supuesto, su pareja también; cerrando este complicado momento con un abrazo lleno de ternura. ¡Qué viva el ¿amor?! Así ha comenzado el octavo programa de ‘La Isla de las Tentaciones’.

Pero al llegar a las respectivas villas, su versión parecía bien diferente: ambos habían decidido aprovechar la experiencia, cada uno por su lado. Carla con Diego y Carlos con Lola.

Después de la fiesta de turno, lo realmente sorprendente no fue que Fiama y “Manué” traspasaran los límites en el baño, “esta noche carricoche” decía el andaluz; sino el acercamiento entre Lucía e Isaac “Lobo”, el pretendiente de Marina. “Me estoy agobiando, me estoy cansando de ella (refiriéndose a Marina)”, confesaba el tentador en actitud cariñosa mientras le acariciaba.

Unas imágenes que a posteriori tuvo que ver Marina que, a juzgar por su cara, la situación entre ambos le hizo de todo menos gracia: “Visto así, es fuerte. Hay tensión sexual, yo creo que él te hubiera besado. Me ha sorprendido”. Pero el “enfado” se le pasó rápido porque la noche entre Marina y “Lobo” terminó con sexo bajo las sábanas. Pero no fueron los únicos, pese a la sorpresa del resto de habitantes de la Villa, Lola y Carlos también ardieron en pasión la misma noche.

Unas duras imágenes a las que después han tenido que enfrentarse en la hoguera sus respectivas parejas... Sin duda, ¡el programa más ardiente de la tercera edición del reality!