Alberto de Mónaco viaja a Irlanda mientras Chàrlene sigue ingresada en Sudáfrica

Charlène de Mónaco no atraviesa por su mejor momento. La princesa consorte continúa ingresada en el hospital a raíz de unos problemas de salud que comenzaron hace meses y que parecen no tener fin. Mientras ella sigue recuperándose de tan aguda infección otorrinolaringóloga en Sudáfrica, su marido Alberto continúa con su agenda oficial como soberano del pequeño estado europeo y ha viajado hasta Irlanda acompañado de sus hijos pequeños, Jacques y Gabriella.

El príncipe Alberto y los pequeños han visitado el Trinity College de Dublín, una prestigiosa institución educativa a la que la familia real ha donado un millón de euros para que se destine a restaurar la biblioteca del centro. Destaca y llama la atención que el soberano no haya cancelado su agenda oficial para estar cerca de su mujer en Sudáfrica en esta nueva recaída, aunque él mismo se encargó de desmentir hace poco los rumores que circulaban sobre un posible divorcio.

“Charlène de Mónaco está impaciente por volver a casa y espera poder volver a reunirse con su familia, esta vez en Mónaco, antes de lo esperado”, aseguró el príncipe en declaraciones concedidas a la revista People. También ella anunció a través de sus redes sociales que tanto su esposo como sus hijos habían viajado hasta Sudáfrica para visitarla, destacando que estaba “feliz de verle sano”. Sin embargo, el regreso de la consorte no hace más que retrasarse y el hermetismo de la Casa Real en este sentido no ayuda en absoluto a disipar rumores y habladurías.