Opinión

El diario de Amilibia: Presidente a la fuga, ay

"Dicen que nada más llegar a la Moncloa se fue directo a la ducha para limpiarse el fango y, sobre todo, lo que llevaba en los gayumbos"

VALENCIA, 03/11/2024.- EL presidente del GObierno, PEdro Sánchez, en el Centro de Emergencias de la Generalitat valenciana, en l'Eliana (Valencia), desde el que se coordina la emergencia por la dana, este domingo. EFE/Manuel Bruque
PEdro Sánchez visita el Centro de Emergencias de ValenciaManuel BruqueAgencia EFE

Cuando el Apolo de la Moncloa pronuncia una de las frases lapidarias de la tragedia, «si necesitan ayuda, que la pidan», lo que está haciendo, en realidad, según los hermeneutas más agudos de sus estrategias apolíneas, es nombrar máximo responsable a Carlos Mazón, presidente de la Comunitat Valenciana, y, de paso, resaltar su divinidad ante los mortales: si necesitan ayuda, que me la pidan, o sea, que me recen, que eleven el corazón a su dios y pidan mercedes, que yo, en mi infinita generosidad, los proveeré de todo lo necesario.

Y, mientras, Él, que tiene como modelo de higiene a Poncio Pilatos, se lava las manos. Allá Mazón con su marrón. Que lo crucifiquen si es el deseo de la mayoría, que para eso estamos en una democracia, y él no es del PSOE. Ignora el aviso de los oráculos: cuidado, Apolo, que quien a fango mata, enfangado muere. Pero la máquina del fango no ha parado hasta hacer diana en la misma Corona, y así queda marcada la histórica fecha: 3-N.

El reyDon Felipe habla con vecinos de Paiporta durante su visita
El reyDon Felipe habla con vecinos de Paiporta durante su visita Biel AliñoAgencia EFE

De barro hizo Dios al hombre, y se nota, aunque no tenía a mano otra cosa y había prisas: siete días para toda una creación no son muchos. Del barro de la DANA no brotaron la luz, las plantas y las estrellas, sino la ira de los vecinos desolados que provocó las escenas históricas e histéricas del 3-N: los Reyes aguantando el tirón y un presidente a la fuga.

Como en aquella película, titulada precisamente «Novia a la fuga», en la que Julia Roberts dejaba varias veces plantado al pie del altar a Richard Gere, que ya es dejar. En este caso, los novios eran los Reyes y Mazón: «Si necesitan ayuda, que la pidan». Dicen que nada más llegar a la Moncloa se fue directo a la ducha para limpiarse el fango y, sobre todo, lo que llevaba en los gayumbos.