Explotación laboral

Fuerte revés para Bosco Martínez-Bordiú: su madre, Clotilde, se enfrenta a dos años de prisión

Hace pocos días, el joven entraba en "Supervivientes all Stars" con la ilusión de volver a ganar el reality.

Bosco Martínez-Bordiú, su madre Clotilde y su tío Pocholo
Bosco Martínez-Bordiú, su madre Clotilde y su tío PocholoGtres

Antes de comenzar su aventura hondureña junto a otros ex concursantes del reality "Supervivientes", Bosco Blach Martínez-Bordiú se ha enfrentado a un duro revés familiar. Su madre, Clotilde, ha aceptado dos años de cárcel por haber empleado irregularmente y haber explotado laboralmente a cuatro trabajadores en una finca de su propiedad en Muñopedro, en Castilla y León, según informa "El diario de Segovia".

Tal y como cuenta el citado medio, la hermana de Pocholo Martínez Bordiú admitió los hechos en el juicio celebrado el pasado 4 de junio en la Audiencia Provincial de Segovia. También se sentaron en el banquillo en calidad de cómplice el alcalde de la localidad, José Antonio Velasco Bravo, para quien la Fiscalía Provincial de Segovia solicitó una pena de 21 meses de prisión por considerar que ejercía como encargado de los trabajadores.

Entre 2019 y 2021 Clotilde Martínez-Bordiú tuvo trabajando en su finca, dedicada al cultivo y coto de caza, a dos matrimonios extranjeros en Monte Acedos. Según la Fiscalía, la madre de Bosco conocía la situación irregular en España de estas personas, ya que no tenían ni permiso de trabajo ni de residencia, datos que utilizó para "aprovecharse de sus circunstancias y de la necesidad imperiosa que tenían de trabajar para poder sobrevivir", acusan.

La Fiscalía también destaca que los trabajadores trabajaban de lunes a viernes doce horas (de 7:00 a 13:00 y de 15:00 a 21:00), sin tener ni las vacaciones ni los descansos correspondientes. Además, recibían un salario en B de 900 euros mensuales, lo que equivale a 2,5 euros por hora.

Según revelaron los trabajadores al medio segoviano realizaban tareas de mantenimiento, desbrozando lavanda y aunque en alguna ocasión tuvieron algún accidente, el encargado de la finca les pidió que no contaran al equipo médico que se lo había realizado mientras trabajada.

Además, una de las ex trabajadoras confesó en el juicio que "conmigo quien trataba era Clotilde, y con mi marido, José Antonio. Me despidieron porque me quedé embarazada".

En la misma situación se habría encontrado otro matrimonio extranjero entre 2020 y 2021 pero la Fiscalía no ha podido localizarles para tomarles declaración. Eso sí, la Audiencia Provincial reprodujo su declaración durante la fase de instrucción y aseguró que si estos trabajadores estaban indispuestos o enfermos y no podían acudir a su trabajo se lo descontaban del sueldo.

Aunque se le imputan 24 meses de prisión, Clotilde no entrará si no se le imputa ningún otro delito. Además deberá pagar una multa fijada en dos partes de 10.811 euros que recibirán los integrantes de uno de los matrimonios, 5.026 euros a cada miembro de la pareja del otro, 9.130 euros a la Seguridad Social y otros 12.000 euros a las víctimas por los daños morales. Una responsabilidad civil que deberá ser abonada por el alcalde si es condenado, ya que explicó que desconocía la situación irregular de los trabajadores.