Concierto
Isabel Pantoja vuelva a Sevilla con la mitad de público
En el Estadio de la Cartuja acompañaron a la tonadillera rostros como Raquel Bollo o Gloria Camila Cano, pero menos asistentes que en 2017
Isabel Pantojaha vuelto a deslumbrar ante su público en su Sevilla natal. Esta cita da inicio a su gira ‘50 años’ que conmemora la carrera musical de la tonadillera. Entre los asistentes más reconocidos ha resonado el nombre de Raquel Bollo, que asistía al evento con un grupo de amigas que incluía a Gloria Camila Ortega, hija de Rocío Jurado. A pesar de que a día de hoy su contacto sea menos estrecho, ninguna de las dos ha querido perder la oportunidad de esta puesta en escena que duró más de tres horas.
El concierto de Isabel Pantoja fue un evento marcado en la ciudad a la que acudieron 6.000 fans de la tonadillera. Hacía algunos años que la Pantoja no actuaba ante su público de la capital hispalense. La última vez, en 2017, fueron 12.000 espectadores que asistieron para ver a la artista. En esta ocasión la suma se ha reducido considerablemente, a pesar de que las entradas costaran diez euros para aquellas personas que se encontraran en situación de desempleo.
Fueron más de tres horas en las que la tonadillera resplandeció en el Estadio de la Cartuja y durante ese tiempo hizo un repaso a su discografía entonando algunos de sus éxitos como 'Marinero de luces' o 'Yo soy esa'. El entusiasmo de la artista ya se dejaba ver desde antes de que diera inicio al concierto: “Por eso aún estoy en el lugar de siempre, en la misma ciudad y con la misma gente. Sevilla mañana vamos a disfrutarlo”, comentaba desde su perfil de ‘Instagram’.
Y es que, desde este mismo perfil también compartió el momento en el que entraba al escenario junto a su equipo y sus músicos. El vídeo muestra a una Pantoja muy emocionada a la que se le une su querida Anabel Pantoja, que no es la primera vez que se vuelve un apoyo indispensable para ella. En un momento de la actuación la sobrina de la tonadillera sorprendió al público subiendo al escenario. ¿El motivo? Un pequeño contratiempo con su vestido y por el que requirió la ayuda de Anabel. En ese momento la influencer fue acogida con una cálida ovación por parte del público.
Un concierto muy sentido en el que reconectó con sus fans de la capital hispalense después de seis años. Sin embargo, la respuesta del público no fue la esperada, ya que se notaron los vacíos tanto en las gradas como en la pista. El precio general de la entrada podía variar de 50 a 200 euros, sin incluir las entradas con un precio especial para personas desempleadas.
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