Kiko Rivera desvela algunos de los momentos que más le han marcado

Kiko Rivera ha decidido, en una charla tranquila e íntima, relatar alguno de los momentos que más han marcado su vida. El canal por el que ha decidido tomar esta iniciativa ha sido el podcast de ‘The Wild Project’, en él se ha abierto y relatado algunos de los momentos que marcaron su infancia y la persona en la que se ha convertido. Y es que, aunque a día de hoy su relación con su madre no sea la mejor de todas, han demostrado últimamente un acercamiento que deja entrever el cariño que se tienen. “Gracias mamá por venir a verme, por pasar esa tarde juntos que para nosotros fue tan necesaria”, relató tras su ingreso el pasado 14 de julio.

Sin embargo, es ahora cuando ha decidido contar sus vivencias de un modo más distendido y dar detalles de sus relaciones que, hasta el momento, no había hecho en público.

Comenzó relatando su niñez y adolescencia, mostrándola con restricciones muy duras por parte de su madre que le impedían salir por la noche, frecuentar discotecas o asistir al cine. Fue por ello que al alcanzar la mayoría de edad Kiko decidió explorar toda esa libertad que conlleva no dar explicaciones a nadie. Con un amigo financió un año de alquiler de un apartamento, pero aquí comenzó a ver lo dura que podía llegar a ser la independencia. Sin la supervisión y el amparo de su madre tuvo que aprender a valerse por sí mismo y de esta etapa, según sus propias palabras, relata que se trató de “la experiencia más aleccionadora de mi vida”.

Sin embargo, ante esta nueva etapa decidió disfrutar del mundo de la noche y vivir la vida. No tardó mucho, en una de sus salidas nocturnas, en ser descubierto cuando un desconocido le propone su primer bolo. Sus inicios empezaron siendo modestos, pero con el tiempo llegó a cobrar hasta 60.000 por una sesión de fotos.

Pero con todos estos ingresos también llegaron los excesos y Kiko Rivera se vio envuelto en el lujo y los vicios. En el programa ha llegado a admitir que gastó hasta 8 millones de euros en adicciones que desembocaron en problemas de salud.

A su historia también se suma la relación que mantuvo Isabel Pantoja con Julián Muñoz. Por su parte, la pareja de su madre siempre lo había tratado bien, pero su abuela materna no aprobaba esta relación, por lo que con el tiempo desencadenó un fuerte distanciamiento entre las dos.