Michael Iglesias, hijo de Julio Iglesias, pillado en Marbella con su novia Julie Steen

Ocho son los hijos que Julio Iglesias ha traído al mundo, al menos sí los reconocidos de manera legal, aunque hay otros que aún litigan para ser reconocidos como legítimos. Unos han seguido sus pasos en el mundo del espectáculo, como es el caso de Enrique Iglesias o Julio José, en distinto grado de éxito. Chabeli Iglesias, por su parte, ha optado por una vida más discreta, aunque también concede entrevistas y hace incursiones televisivas, lo que le acerca más al legado de su madre, Isabel Preysler. Pero los otros cinco hijos del artista son mucho más discretos, eligiendo en su caso la discreción que hace gala su madre, Miranda Rijnsburger.

Quizá las más famosas de la exmodelo holandesa sean Victoria y Cristina. Las gemelas han crecido, al igual que sus hermanos, a la sombra del éxito de su padre y manteniendo un perfil público bajo. Pero con su mayoría de edad sintieron el ímpetu de ser reconocidas por las masas al protagonizar una estelar aparición en la alfombra roja de la Gala Met 2019. Depsués han utilizado las redes sociales para mantener a todos informados de sus pasos, aunque sin demasiadas pistas, pues sus padres se lo desaconsejan. Han pasado estas semanas por Marbella, como así terminaron siendo ‘cazadas’. Ahora en su exclusiva finca familiar de Ojén está su hermano mayor, Michael Iglesias, muy bien acompañado.

Michael Iglesias, en Marbella con su amada

Michael es, quizá, uno de los hijos menos populares de Julio Iglesias. Bien podría pasearse por Puerto Banús y darse chapuzones en las playas de la Costa del Sol, que podría pasar desapercibido. Sin embargo, sus vacaciones en la finca familiar de Ojén no han logrado esquivar la atención puesta cada verano por la prensa, ansiando encontrarse con su padre. Ahora bien, el cantante ha optado este año por no abandonar Miami y encargarse de cerrar todo lo necesario para la adquisición de una mansión en Galicia, tierra de su padre Papuchi.

Michael y su novia, Julie Steen, están ahora mismo disfrutando de los placeres que le ofrece la finca familiar ‘Cuatro Lunas’. Son 450 hectáreas ideadas para su privado descanso y diversión. Un enclave privilegiado en la localidad malagueña de Ojén donde este verano ya se ha visto a sus hermanas, Victoria y Cristina, así como a su madre, Miranda Rijnsburger. Ahora le toca el turno de pasarlo bien al hijo mayor del matrimonio, de 27 años, que estudió Finanzas y se dedica al sector inmobiliario de lujo, aunque sus pasos son tan discretos que despista a propios y extraños. Su novia, de 23 años, empresaria, diseñadora y modelo, le acompaña.

La pareja no está sola en estos instantes en la finca familiar en la Costa del Sol, pues junto a ellos ha cruzado el Atlántico su hermano Guillermo, el pequeño del clan, que este año ha cumplido los 18 años. Michael Iglesias y su novia han sido vistos ya saciando su apetito y estimulando su paladar en uno de los mejores restaurantes de la zona, mientras que alejados de miradas indiscretas sacan el mayor partido a la finca. Paseos en quad o a lomos de uno de sus caballos, chapuzones en la piscina y mucho deporte han sido su entretenimiento en su estancia veraniega, esa que siempre es muy discreta, aunque algunos detalles logren trascender a su intento de pasar desapercibidos.