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Preciosas palabras

Raúl González aplaude a su mujer, Mamen Sanz, por su sacrificio por él

El futbolista concede una entrevista en la que deja claro que sus triunfos no habrían sido posible sin su esposa, a quien le debe todo

Mamen Sanz y Raúl González Gtres

Raúl González ha vivido de una apacible vida alejado del foco mediático desde que colgase las botas. La familia que ha formado con su mujer, Mamen Sanz, ha logrado pasar desapercibida y no ser objetivo de los focos ni protagonizado polémicos titulares. Han sabido mantener la discreción. Aun así, esto no ha evitado que en ocasiones se den baños de masas, se dejen ver en photocalls y alfombras rojas en alguna cita importante o que concedan también entrevistas. Así lo ha hecho el futbolista ahora que ha hablado para el podcast NDL Pro-Health Con Mucho De…’.

Aquí ha analizado su carrera en los terrenos de juego, siendo uno de los grandes del balón de nuestro país. Su aportación al mundo del fútbol es inestimable y vistiendo la camiseta del Real Madrid logró hacer historia. Son muchos los momentos legendarios que recuerda en su repaso con la periodista Alba Lago. Pero no se olvida de algo de vital importancia y es que para que él pudiese brillar, detrás contaba con el sacrificio de su mujer. Sin ella no habría podido tener la familia de la que ahora se siente orgulloso.

Las preciosas palabras de Raúl González a su mujer

“Solo se puede compatibilizar si tienes una gran mujer al lado (…) Y eso es gracias a mi mujer, Mamen”, concede el deportista, que no duda en afirmar que formar la familia que siempre había soñado es su auténtica victoria personal: “Crear una familia y ser jugador profesional” eran sus sueños. Cumplió los dos, no puede estar más agradecido a la vida. Pero también especialmente a su mujer, que “dejó sus ilusiones”, entre ellas su propio trabajo, para volcarse de lleno en acompañar a su marido en su carrera y sacar adelante a su familia.

“Lo que ha hecho es cuidar de mis hijos y crear esta hermosa familia que tenemos después de 26 años”, dice Raúl González, padre de cinco hijos. Pone un ejemplo del compromiso de su esposa y de cómo él ha podido despreocuparse de cuestiones vitales, para centrarse tan solo en su rendimiento como futbolista: “Cuando nos fuimos a Alemania, tras 17 años en Madrid, el día antes yo me fui a dormir y mi mujer pensando en el colegio, los cinco niños…”.

Raúl González y Mamen Sanz llevan 26 años formando equipo, después de iniciar su romance en 1997. Dos años después se juraron amor eterno en la correspondiente boda y están cumpliendo con la promesa. Llegaron sus cinco hijos. Han pasado por mucho: “Rápidamente, cuando nos conocimos, teníamos la ilusión de disfrutar juntos, crear una familia, de pasárnoslo bien. Según van pasando los años hay muchas etapas”. El trabajo de él ha sido fuente de alegría, pero también de retos para el matrimonio: “Pasas mucho tiempo fuera, pero se va compaginando. El amor va creciendo en diferentes etapas”.

Ahora están en una “tranquila, más relajada”, porque los hijos mayores “ya vuelan solos”. Como padre, Raúl González confiesa que “no es fácil, nadie te enseña, pero tú intentas educar a los hijos, en teoría, de la misma manera o de la misma forma. Cada uno es diferente y necesita cosas diferentes. La capacidad de intuición, de estar pendientes, de saber lo que realmente necesitan… Ahí nos hemos compaginado muy bien. Mi mujer es de las mejores”.