El viaje de Pedro Sánchez a China, arriesgado, según el PP, "en un momento de extraordinaria dificultad", ha despertado la inquietud por las relaciones con el líder comunista Xi Jinping, el más poderoso que ha tenido el país desde la muerte de Mao Zedong, en 1976. Nacido en Pekín el 15 de junio de 1953, promueve una ideología basada en el pensamiento marxista-leninista y en el de Mao Zedong. ¿Quién es la esposa de este hombre que, por su nacimiento, es considerado "príncipe"?

Peng Liyuan, primera dama china, es una famosa soprano y cantante folclórica cuya imagen contrasta con las parejas presidenciales anteriores, que por tradición mantuvieron un perfil bajo. El matrimonio tiene una hija, Xi Mingze, de 32 años y muy discreta. Estudió la carrera de psicología y literatura inglesa en la Universidad de Harvard, escondida bajo un pseudónimo y protegida por el aparato censor del régimen. Se contaban con los dedos de las dos manos las personas que conocían su identidad durante su etapa universitaria.

Su segundo matrimonio

Para Xi Jinping este es su segundo matrimonio. Divorciado de su primera esposa, Ke Lingling, tras tres años de matrimonio, conoció a Peng en Fujian y se casaron en 1987, justo cuando cumplían el primer aniversario de su primera cita. Ella era entonces una cantante y actriz muy popular en China. Ha obtenido numerosas distinciones en concursos de canto a nivel nacional y durante años su nombre era habitual en la Gala Anual de CCTV de Año Nuevo.

Nació en 1962 y con su voz se ha ganado un reconocimiento nacional e internacional. También por su trabajo como Embajadora de Buena Voluntad de la OMS, centrando sus esfuerzos en el impulso de la investigación de enfermedades como la tuberculosis y el sida. "Nos enorgullece extraordinariamente que una actriz y artista de la talla de Peng preste ahora su voz de fama mundial y su corazón humanitario en apoyo de las actividades de la OMS relativas a esas dos enfermedades, un terreno en el que las personas de su influencia pueden lograr que se produzcan importantes cambios", destaca el organismo en un comunicado.

La primera dama china trabaja desde hace años en actividades vinculadas con estas enfermedades, desde la atención de los huérfanos causados por el sida hasta la importancia de que se realicen pruebas de detección del VIH y se adopten medidas de protección apropiadas. Su entrega le ha llevado a visitar pacientes de tuberculosis en zonas golpeadas por la pobreza y a hacer donaciones personales.

Glamour al régimen

Como cantante y actriz, Peng aportó un punto de glamour a la presidencia china y allanó a su marido el camino al poder, si bien con los años su rol se ha vuelto más tradicional, pero sin dejar sus labores de voluntariado. En 2022, organizó un evento para la prevención del SIDA con esposas de otros países BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) y se aseguró de que se celebraran eventos similares en más de 50 universidades chinas.

En 1999, en una entrevista para una cadena de televisión de Hong Kong, reconoció que las cualidades que más admiraba en un hombre eran el éxito, la ambición y la capacidad de mando. Cuando se le preguntó si su marido Xi Jinping cumplía con sus requisitos, Peng respondió sin dudar: "He estado casada con él durante más de una década, por supuesto".

Xi fue elegido líder del Partido Comunista Chino en 2013 y designado presidente de China al año siguiente, lo que convirtió a su esposa en la primera dama del país. Su papel ha sido decisivo. Acompaña a Xi a conferencias internacionales y visitas diplomáticas, además de hacer apariciones y discursos en las Naciones Unidas y en eventos benéficos mundiales. Su influencia fue también un impulso para conseguir el apoyo de 1.400 millones de personas y su tercer mandato en el poder.

Cenicienta de Shandong

Apodada la "Cenicienta de Shandong" , la provincia costera donde nació, provenía de una familia de artistas de la provincia de Shandong y su madre fue una famosa actriz de ópera clásica china. Desde niña soñó con tener un piano y triunfar como cantante. En 1984, se unió a la Banda de Música del Ejército Popular de Liberación (EPL), sede de los mejores músicos y artistas de China debido a sus ricos recursos y oportunidades de actuación. Se dice que actuó para la fuerza militar que reprimió violentamente las protestas de la Plaza de Tiananmen en junio de 1989. Cuando se convirtió en primera dama, era decana de la Academia de Artes del EPL.

El departamento de propaganda del Partido ha utilizado la imagen de Peng y su historia de amor para dulcificar la imagen del presidente. De hecho, Xi Jinping ha sido el primer gobernante chino en hacer pública su vida privada, hablando abiertamente de su amor por ella. "Ya te reconocí como mi futura esposa los primeros 40 minutos que nos conocimos", declaró. Tampoco es extraño que vayan de la mano en público, un gesto inusual en los hombres que ostentan el poder en el país.

La cara amable de Xi

Como hemos visto en algunas cumbres, Peng acompaña a su marido en visitas diplomáticas al exterior, se une a las esposas de otros líderes en reuniones internacionales y trabaja como enviada especial de la UNESCO para la educación de las niñas y las mujeres. En noviembre de 2018, el matrimonio visitó España y fue invitado a una cena de gala en el Palacio de la Zarzuela con el Rey Felipe VI y la Reina Doña Letizia.

Hasta 1961, existía una regla tácita sobre las visitas diplomáticas: a los líderes gubernamentales no se les permitía llevar a sus cónyuges con ellos si visitaban países socialistas. A partir de entonces se vio el valor de la diplomacia de la primera dama inspirada en el glamour y el poder blando de las esposas de los presidentes estadounidenses. En 1963, Wang Guangmei, esposa del entonces presidente chino Liu Shaoqi, se unió a su esposo y otros diplomáticos para visitar Indonesia.

A pesar de que Xi se ha convertido en uno de los líderes mundiales más impopulares en Occidente, su mujer ha sido vital para suavizar su imagen en la diplomacia exterior. En los primeros años del gobierno de su marido, Peng forjó un vínculo estrecho con la primera dama estadounidense, Michelle Obama.