Música

Crítica de cine

Filmografía de Elizabeth Taylor

«There's One Born Every Minute» (1942)
«There's One Born Every Minute» (1942)larazon

«There's One Born Every Minute» (1942)
De Harold Young. El debut en el cine de Taylor a los 10 años fue en una mediocre comedia cuyo escaso éxito provocó que Universal hasta prescindiera de la actriz. Mala decisión: poco después firmaba con la Metro y se convertía en una de las niñas prodigio más famosas de la historia.


«La cadena invisible» (1943)
De Fred M. Wilcox. Lassie, la estrella canina, vertebra un suave drama en el que Taylor comparte plano con Roddy Mc Dowall.


«Las rocas blancas de Dover» (1944)
De Clarence Brown. Una mujer (Irene Dunne) se casa con un lord que es llamado a filas. Un drama con la guerra al fondo muy de la época y una Taylor que tiene un papelito tan corto que su nombre no figuró ni en los créditos.


«Fuego de juventud» (1944)
De Clarence Brown. Drama algo bobo sobre una adolescente apasionada por los caballos que sueña ganar el Grand National. Todo se va al traste cuando el jockey abandona el proyecto.


«El coraje de Lassie» (1946)
De Fred M. Wilcox. Lassie y Taylor vuelven a verse las caras. La perra, ahora sin dueño, es adoptada por una chica. Un accidente provoca que acabe en una unidad militar. A mayor gloria de la parejita.


«Vivir con papá» (1947)
De Michael Curtiz. Deliciosa comedia sobre una familia de clase acomodada regida por un padre atento pero estricto.


«Mujercitas» (1949)
De Mervyn LeRoy. Vuelve la historia de las cuatro hermanas. Y qué reparto: June Allyson, Janet Leigh y una monísima Taylor.


«El padre de la novia» (1950)
De Vincente Minnelli. Delicioso filme con un soberbio Spencer Tracy. Taylor se hizo aún más popular como la niña de sus ojos.


«Un lugar en el sol» (1951)
De George Stevens. Magnífico drama: un ambicioso tipo (Clift) obsesionado con una chica bien (Taylor) llegar a matar por ella.


«Gigante» (1956)
De G. Stevens. Un matrimonio de Texas, un conflictivo trabajador, petróleo... Un filme mítico, aquel que no pudo acabar James Dean.


«El árbol de la vida» (1957)
De Edward Dmytryk. El hijo de un herborista se casa con una rica heredera. Taylor optó al Oscar, pero no pudo ser. Por ahora.


«La gata sobre el tejado...» (1958)
Richard Brooks. Un clásico y los dos pares de ojos más fascinantes de la historia: los de Taylor y Newman. Tennessee Williams en estado puro.


«De repente, el último...» (1955)
De J. L. Mankiewicz. Y más del dramaturgo, una historia rara a la que el tiempo le ha hecho daño. Ah, Taylor volvió a ser nominada.


«Cleopatra» (1963)
J. L. Mankiewicz. Maltrataron el filme, pero Taylor jamás: en ella conoció a Burton, su gran y complicado amor.


«¿Quién teme ...?» (1966)
De Mike Nichols. Martha discute con su marido, y bebe, y discute... Dicen que esta «Virginia Woolf» refleja las tensiones entre Taylor y Burton. Bueno, ella ganó el Oscar.


«Reflejos en un ojo...» (1967)
DeJohn Huston. Dos de los intérpretes más bellos de la historia, Taylor y Brando, se ven las caras entre militares y un gay reprimido. Las arrugas se le notan al filme demasiado.


«El pájaro azul» (1976)
De George Cukor. Tras diez años baldíos, se pone en las manos del gran director. Que ya no estaba para muchos trotes, por desgracia.


«Los Picapiedra» (1994)
De Brian Levant. Aunque la Taylor aparece estupenda como la madre de Vilma, la cinta basada en la serie de animación es flojita. Adiós, Liz.