Estados Unidos

Gas Natural Fenosa firma su mayor contrato de gas licuado

La Razón
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MADRID- Las mejoras técnicas que están permitiendo la recuperación a precios competitivos de hidrocarburos no convencionales –aquellos atrapados entre las rocas en el subsuelo– están empezando a beneficiar de forma notable a las compañías españolas. El 7 de noviembre fue Repsol la que anunció el mayor hallazgo de petróleo de su historia gracias al yacimiento argentino de este tipo localizado en Vaca Muerta. Y ayer fue Gas Natural Fenosa la que comunicó la firma con la estadounidense Cheniere de su mayor contrato de aprovisionamiento de gas natural licuado (GNL) gracias al auge de la producción de gas no convencional en Estados Unidos. Cheniere, propietaria de la planta de licuefacción de Sabine Pass (Luisiana), suministrará a partir de 2017, cuando la infraestructura esté completada, 5 bcm anuales –1.000 millones de metros cúbicos– durante un periodo de veinte años, que equivaldría al 15% del consumo del mercado español. Cheniere pasará así a convertirse en uno de los principales suministradores de Gas Natural.

El contrato tiene especial valor para la multinacional española no sólo por su cuantía –supondrá un negocio de entre 1.200 y 1.500 millones de dólares al año en función del precio del gas, según los analistas–, sino también porque el GNL tendrá libre destino. Es decir, que Gas Natural podrá comercializar el producto en la cuenca del Atlántico y en la del Pacífico cuando esté operativa la ampliación del Canal de Panamá, lo que le permitirá obtener un mayor valor en el mercado global del GNL, según la compañía.

Gas Natural es, tras la británica BG, la segunda empresa extranjera en suscribir un acuerdo de compra de gas natural licuado procedente de Estados Unidos. El país norteamericano pasará de ser importador a exportador neto de este gas merced a la mejora de la producción de hidrocarburos no convencionales.

 

Adjudicaciones eólicas en Extremadura
Extremadura ha aprobado las autorizaciones previas para la instalación de 65 parques eólicos más, con lo que ya son 97 los que «pueden entrar» en el registro de preasignaciones, con un potencial de 1.691 megavatios y que crearán 5.073 empleos, aunque se desconoce cuándo comenzará a funcionar el primero. Así lo aseguró en Mérida el consejero de Agricultura, Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Energía, José Antonio Echávarri.