Castilla y León

La factoría de Renault en Valladolid producirá un nuevo motor ecológico

La factoría de la multinacional francesa Renault en la capital vallisoletana fabricará, a partir de 2012, un nuevo motor, una versión del H5 anunciado en su día, pero que será de tres cilindros, gasolina y turbo, de bajo consumo y muy ecológico. El objetivo es, según el presidente de la empresa, Jean Pierre Laurent, triplicar el volumen de fabricación pactado en el Plan Industrial de 2009 y alcanzar la cifra de 450.000 unidades.

El presidente comprobó de primera mano cómo se fabrican los motores en Renault Valladolid
El presidente comprobó de primera mano cómo se fabrican los motores en Renault Valladolidlarazon

Otra buena noticia es que, con toda seguridad, aumentará el ritmo de cadencia en la fabricación del vehículo eléctrico «Twizy», debido al alto número de prerreservas habidas hasta la fecha, más de 5.000, por lo que se podrían producir al año más de las 20.000 unidades previstas. «Estamos dispuestos a afrontar una demanda más importante», señalaba Laurent durante una visita a la planta de motores de Valladolid, acompañado por el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera y el consejero de Economía y Empleo, Tomás Villanueva, entre otras autoridades.

«Futuro asegurado»

Laurent fue categórico al afirmar que la planta de Valladolid «tiene su futuro asegurado» y avanzó que este año aumentará el número de motores fabricados en un 20 por ciento, hasta alcanzar 1.200.000 de unidades.

Por este motivo, el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, ensalzó el trabajo que se viene realizando en la factoría vallisoletana y la puso como ejemplo para la economía regional «para salir cuanto antes de esta crisis más fortalecidos».

Así, no dudó en felicitar a los trabajadores de la empresa en Valladolid por haber sido responsables hace dos años «y alcanzar acuerdos serios, duros y exigentes» en los momentos difíciles y contar por ello, en estos momentos, con el más ambicioso Plan Industrial del sector de la automoción «que nunca antes se había planteado en España».

Herrera volvió a hacer un llamamiento a la competitividad y a «no tener miedo al futuro», apostando por la innovación y por las ventas al exterior y calificó a los trabajadores de Valladolid de «los más competitivos y los más capacitados y ésa es la razon por la que la multinacional haya apostado por este Plan aquí».

Es por ello, que el presidente castellano y leonés alabó el día a día que se desarrolla en esta planta «estratégica» que constituye «el motor y el alma del proyecto de Renault en Castilla y León y en España», al indicar que el 85 por ciento de su producción se exporta al exterior, y eso ha sido clave para batir el récord de exportaciones en la Región en 2010. Además, concretó que ello ha contribuido a la creación de 320 empleos de jóvenes cualificados.

La factoría vallisoletana se ha especializado en la fabricación de productos económicos y ecológicos accesibles a todos los publicos. En la actualidad produce dos motores de gasolina y uno diésel el K9K (1.5 dCi), este último el más vendido de Renault.

El nuevo motor que se va a fabricar, según Laurent, se hará en dos versiones de cuatro y tres cilindros de inyección, con emisiones de menos de 120 y 100 gramos de CO2 y con un consumo de cuatro litros y que se suministrarán a los vehículos de la Alianza Renault y a Mercedes.

Fábrica histórica

Por su parte, el presidente de la factoría vallisoletana, Juan José Palomo, destacó que en los 45 años de historia de la fábrica se han fabricado veinte millones de motores, con una cadencia diaria en la actualidad que llega a los 5.204. Una producción que aporta el 40 por ciento del total del Grupo francés y que más del 85 por ciento de sus productos se exportan con destino a 20 factorías situadas en 15 países.

Por último, Laurent avisó de que en las próximas semanas podría existir algún que otro problema con los suministros que llegan desde Japón, tras el tusnami del pasado viernes 11 de febrero. «De momento no estamos afectados, pero podemos estarlo».

Garoña
El presidente Herrera también se refirió a la central nuclear de Santa María de Garoña tras conocerse que el ministro de Industria, Miguel Sebastián, condicionaba su supervivencia al resultado de la prueba de resistencia que realizará el Consejo de Seguridad Nacional, aunque avanzó que se mantiene su cierre para 2013. En este sentido, Herrera demandó para la central burgalesa el mismo tratamiento que tendrá el conjunto de las restantes centrales nucleares, aunque eso sí, en todo momento apostó «por la seguridad ciudadana» y volvió a defender el empleo en esa comarca.