«Cuenta atrás»: El «grandeur» de Hollywood

Agentes de la ley corruptos, un magnate asesinado, falsos culpables, falsos inocentes, una joven embarazada, que secuestran nadie sabe bien por qué motivo... No, aunque lo parezca tras todo lo apuntado, «Cuenta atrás» no se trata de un thriller estadounidense, pero a fe que lo intenta parecer. Algo muy loable, por otra parte, aunque, como en tantas cosas de esta vida, lo que cuentan son los resultados. Interesante que un auxiliar de enfermería se vea sumergido en un terrible embrollo junto a un peligroso desconocido de un día para otro; pero más, si cabe, que el pobre diablo decida hacer lo que sea (y ello incluye apuntar con un arma y utilizarla llegado el caso) cuando descubre que su esposa ha sido raptada. De ritmo vertiginoso y con unos duros polis por enmedio que hablan igualito que los de Hollywood, el guión pega, sin embargo, demasiados trastabillazos hasta llegar a un final/epílogo que bien se podía haber ahorrado el director. Elena Anaya, aunque aparece demasiado poco, demuestra de nuevo que atraviesa una etapa excelente en su carrera y ratifica que no hay papeles pequeños, sino actrices profesionalmente menudas. Ella, por contra, todavía sigue creciendo.