Barcelona

Edurne Pasabán medita retirarse

La primera alpinista de la historia en coronar los catorce picos de más de 8.000 metros del planeta, Edurne Pasabán, ha comentado en Barcelona que, tras conseguir este histórico hito está preparando una última ascensión al Everest, techo de la Tierra, aunque a diferencia de la primera ascensión ésta sería sin oxígeno.

Tras conquistar el Shisha Pangma en mayo del 2010 y completar el ciclo iniciado en el Everest nueve años antes, la alpinista vasca comentó hoy que sólo se plantea subir de nuevo a éste sin oxígeno, en la primavera de 2011, y después dejar cuerdas y piolets para dedicar tiempo a otras facetas de su vida.

"Nunca dejaré de ir a la montaña, aunque lo más probable es que después de subir al Everest haya llegado el momento de pasar página y dedicarme a cuidar las facetas de mi vida que hasta ahora he tenido más olvidadas", manifestó.

Pasabán, que según la notaria del Himalaya y 'árbitro de los ochomiles' del alpinismo, Miss Hawley, es la primera mujer en conquistar todas las cimas de más de 8.000 metros (por delante de la coreana 'Miss Oh', quien se atribuyó indebidamente la gesta), explicó hoy su carrera y sus vivencias en el marco del 'Foro Mujer y Liderazgo' organizado por BancoSabadell y ESADE.

Durante su intervención, reconoció que liderar colectivos humanos en determinados tipos de actividad siendo una mujer supone un handicap añadido. Según su experiencia, las personas que lideran equipos debe ser capaces de reconocer el trabajo bien hecho, pero también llamar la atención a cualquiera de los miembros del equipo cuando las cosas no marchan como sería deseable, para evitar que los conflictos se acaben enquistando.

"Algo que es especialmente difícil y fundamental en expediciones de alta montaña, porque las relaciones que se establecen entre sus componentes son muy estrechas y la convivencia es muy intensa, y por lo que no puede permitirse que los conflictos queden latentes", explicó.