Gómez: las políticas activas de empleo son la «gran asignatura pendiente»

Durante su intervención en el debate de Presupuestos en la Cámara Baja, el ministro comparó las políticas destinadas a la formación e impulso del empleo en España con el resto de Europa. "España se compara bastante mal en lo que gasta en dinamización de políticas a desempleados", ahondó, si bien quiso poner el acento en que se sitúa "muy bien"en protección.

"España no es un país que gaste mucho en políticas de empleo, pero sí que es el que más gasta en bonificaciones (a la contratación)", ahondó Gómez al recordar que los PGE para 2011 cuentan con cerca de 2.500 millones de euros para las bonificaciones a empresas.

Por ello, garantizó la "especial atención"del Ejecutivo a las políticas de formación y activación del empleo, al tiempo que reiteró que la reforma de estas políticas debe ser consensuada con los agentes sociales y las comunidades autónomas, de las que depende su gestión, antes de que finalice el próximo mes de enero.

Asimismo, el titular de Trabajo defendió la reforma laboral por "redefinir"las bonificaciones y orientarlas hacia los jóvenes menores de 30 años y mayores de 45 años en desempleo durante más de un año. "Las bonificaciones rinden más cuando centran su foco", ilustró, para después garantizar que estas partidas se concentrarán en estos colectivos durante "unos años".

En este sentido, el diputado de IU, Gaspar LLamazares, volvió a reprochar al nuevo titular de Trabajo su defensa de la reforma del mercado de trabajo cuando participó precisamente en la huelga general convocada por los sindicatos en repulsa de esta ley. "Usted estuvo en el 29-S", clamó LLamazares.

El sucesor de Celestino Corbacho también se congratuló de la protección por desempleo desde que estallara la crisis, al recordar que ésta representa casi el 3% del PIB. "Ahora la sociedad es capaz de proteger a más desempleados destinando menos", afirmó.

Ante un eventual recorte de las prestaciones, Gómez se comprometió a "activar"a los parados "sin afectar"la magnitud de sus prestaciones y acusó de forma velada al PP de "hipocresía". "Díganlo abiertamente", espetó.

Al respecto, el ministro se apresuró a aclarar que los desempleados "no es que no quieran"aceptar puestos de trabajo, sino que más bien "no hay empleo suficiente"para los más de 4,5 millones de parados.

Sobre la ayuda de 426 euros a aquellos parados que agotaron su prestación contributiva, Gómez reiteró que este programa no debe tener "voluntad de permanencia", en tanto que resaltó que el Gobierno socialista es quien propuso el proyecto de ley que aprobaba el paro de los autónomos por cese de actividad.

"Puede decirse que los Presupuestos de 2011 son austeros pero también que priorizan las partida más relevante para impulsar actividad y refuerzan la protección social. (...) Y están destinados a hacer más eficaz el mercado de trabajo", explicó.

Por su parte, el diputado 'popular' José Ignacio Echániz reprochó a Gómez su "autocomplacencia"con el Presupuesto de Corbacho, cuya trayectoria calificó de "fracaso".

"Es un político nuevo para una política vieja", lamentó, al tiempo que realizó un nuevo reproche: "Estos son los Presupuestos del incumplimiento y de los recortes indiscriminados".