Cataluña

Trias da la orden a la Urbana de no multar a los conductores con el «CAT»

El alcalde dice que el trabajo de los agentes es «agilizar la circulación»

Trias da la orden a la Urbana de no multar a los conductores con el «CAT»
Trias da la orden a la Urbana de no multar a los conductores con el «CAT»larazon

BARCELONA– Llevar el distintivo «CAT» en la matrícula ha dejado de ser un motivo de sanción administrativa. Al menos, a los ojos de la Guardia Urbana. Así lo ha ordenado el alcalde de Barcelona, Xavier Trias a sus agentes. «Nosotros no tenemos por qué multar a la gente que lleva el "CAT"», afirmó ayer Trias en una entrevista en Catalunya Ràdio.
El alcalde fue muy preciso en sus instrucciones, asegurando que los guardias urbanos «han de saber» que «su trabajo es agilizar la circulación, no perseguir a la gente que lleva el "CAT"». Trias no citó en ningún momento la normativa que impide el uso de estos adhesivos, sino que abogó por la manga ancha.

La abstención de CiU
La semana pasada, el grupo de CiU se abstuvo en el Ayuntamiento de Barcelona en una votación promovida por Unitat per Barcelona –la marca de Esquerra en el consistorio– que defendía el uso del «CAT» en todos los vehículos a motor.
La iniciativa de poner este adhesivo territorial nació en el año 2000 (cuando desapareció el distintivo provincial), pero el pasado verano volvió a cobrar fuerza, puesto que el portavoz del Govern, Francesc Homs, dijo «echar en falta» que los catalanes se sumaran a esta campaña. «Ya nadie se lo pone», lamentó.
Homs, además, aseguró que no había ningún impedimento legal para colocarse el «CAT», ya que, a su entender, «la matrícula, según está tipificado en el código de circulación, es solo la combinación de cuatro números y tres letras». «Quien quiera, que se ponga el "CAT"sobre la "E"», animó.
Lo cierto es que varios de los vehículos oficiales de los parlamentarios catalanes llevan el «CAT» sobre la «E», lo cual motivó la protesta del grupo del PP. A través de una carta dirigida a la presidenta del Parlament, Núria de Gispert, los populares reclamaron que se tomaran medidas. «Las instituciones públicas tenemos la obligación de cumplir en todos sus extremos la normativa vigente y, además, tenemos que dar ejemplo de este cumplimiento», manifestó el portavoz parlamentario del PP, Enric Millo, en esta misiva enviada el pasado 22 de julio.
Los populares criticaron que el Govern destinara «un solo minuto» a hablar de matrículas e incluso pidieron la dimisión del portavoz de la Generalitat. También Ciutadans criticó la postura de Homs, a quien calificó de «hooligan con corbata».
En realidad, el argumento del portavoz del Govern de que llevar el «CAT» no puede ser motivo de multa ha sido desmentido reiteradamente por las propias fuerzas y agentes de la seguridad. Las sanciones por colocar otros caracteres distintos a los que vienen de serie en cada matrícula pueden llegar a los 200 euros.


La normativa prohíbe «adornos» en las matrículas
Pese a la insistencia de varios diputados del Parlament, incluso del propio conseller de Interior, Felip Puig, o de formaciones como ERC o Solidaritat, la normativa de Tráfico es muy explícita en lo que se refiere a colocar adhesivos encima de la matrícula. El Real Decreto Legislativo 339/1990 que aprobaba el Texto Articulado de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, y el Reglamento General de Vehículos aprobado por el Real Decreto 2822/1998.
En estos textos se establece que «queda prohibido que en las placas de matrícula se coloquen, inscriban o pinten adornos, signos u otros caracteres distintos de los señalados en el anexo XVIII incluida la publicidad en el interior de las mismas». Por lo tanto, el argumento utilizado por los diputados de CiU queda invalidado. Tanto Puig como el portavoz de la Generalitat, Francesc Homs, aseguraron que la normativa apenas estipula que «una matrícula son cuatro números tres letras».